Debido a la negativa de ocho de los 12 regidores del cabildo, por autorizar la cuenta pública 2016 y los estados financieros de este año, el alcalde optó por enviar dicha información a la Auditoría Superior del Estado (ASE) sin su aval.
Así lo confirmó el edil, quien aseguró que confía en comprobar adecuadamente los gastos ante el organismo fiscalizador del Estado.
Esto sucede a tres meses de que un grupo de ocho regidores, mostrara inquietud y dudas con la aplicación de los recursos públicos, ante los señalamientos contra el edil, quien se presume habría entregado recursos a una veintena de empresas fantasma.
El grupo de regidores ha rechazado en cuatro cabildos consecutivos, aprobar los estados financieros de febrero y marzo de este año, así como la cuenta pública del 2016.