Unas 20 viviendas asentadas en la calle 15 de abril en la Unidad Habitacional Obreros Independientes de la VW, lado norte, se vuelven inhabitables en temporada de lluvias, debido a que desde hace cinco meses el drenaje se colapsó, y las autoridades municipales se han negado a reparar los daños, bajo el pretexto de que ellos no pagan los servicios del agua potable.
En entrevista, afectados, mencionaron a Cambio Regionales, que, en esta unidad habitacional, cuentan con órgano autogestor de los servicios del agua potable al cual le pagan por el vital líquido, sin embargo, refieren, que el resto de las contribuciones, si las realizan en el Ayuntamiento de Cuautlancingo, por ello exigen que les brinden la atención inmediata, pues desde hace 5 meses tienen que lidiar con las aguas negras que brotan de las alcantarillas.
“Este problema ya se convirtió en un problema de salud, ya que el agua pluvial junto con el agua negra del drenaje, al no encontrar salida, brota de las alcantarillas dentro de las casas y los baños, inundando los patios y las casas con aguas negras”, externó, Rogelio Méndez.
Explicaron que en temporada de lluvias el problema se sale de control, por la cantidad de agua que se queda acumulada, y el resto del año, también brotan aguas negras, aunque en menor cantidad, pero provocan mal olor.
Los quejosos explicaron que han acudido al Ayuntamiento para pedir ayuda, y la respuesta que les dan, es que sólo podrán ayudarles proporcionándoles tubos, y la obra debe correr por su cuenta, pues ellos no están pagando el servicio del agua potable al municipio.
“Nos reprochan que no pagamos agua potable al municipio porque tenemos un órgano autogestor, pero lo que no dicen, es que, si estamos pagando nuestro predial, y la recolección de basura. La mayoría de los vecinos somos personas de la tercera edad y pensionados, no tenemos recursos para poder reparar por nuestros propios medios el tramo colapsado”, agregó.
Mencionaron que es urgente que el drenaje quede reparado antes de la temporada de lluvias, para evitar que las aguas negras hagan estragos con sus propiedades y sus muebles.
Algunos, como José Almazán, relataron que las lluvias del año pasado, provocaron pérdidas en su vivienda de más de 30 mil pesos, pues el agua estancada dañó electrodomésticos, y muebles, los cuales no pudo poner a resguardo a tiempo, pues vive sólo con su esposa, ambos de la tercera edad.
"Mi esposa y yo tenemos más de 70 años, ya no tenemos las mismas fuerzas de antes, y claro que cuando la casa de llenó de agua, sólo pudimos alzar las cosas menos pesadas para evitar que les entrara el agua. Algunas sillas y mesas de madera, fue lo único que pudimos poner a resguardo, porque el refrigerador no lo aguantamos, la estufa, y hasta los sillones, quedaron inservibles", agregó.