Los Centros de Readaptación Social (Ceresos) de Atlixco, Izúcar de Matamoros y Chiautla de Tapia –que sufrieron daños a causa del sismo del pasado 19 de septiembre– ya no serán remozados como museos pues se trabaja en su rehabilitación para que los 379 reos que fueron dispuestos en su momento en el penal de San Miguel –ubicado en Puebla capital- regresen.

Lo anterior lo aseguró el secretario de Seguridad Pública estatal, Jesús Morales Rodríguez, aunque no precisó la cantidad que se está invirtiendo.

“La instrucción del gobernador del estado es que se rehabiliten esos Ceresos porque los reos están cumpliendo de acuerdo a su jurisdicción, tienen que cumplir bajo sus sentencias. Lo primero es garantizar la seguridad de ellos y una vez que comiencen a ser reparados o que ya estén al 100 por ciento estos Ceresos, irán regresando”, dijo el funcionario estatal.

El pasado 11 de octubre el gobernador Antonio Gali refirió que dichos inmuebles serían remodelados para convertirse en museos, pues eran edificios históricos del siglo XVII y XVIII.

En entrevista, antes de clausurar el foro ‘Sumemos Causas por la Seguridad, Ciudadanos+Policías’, Morales Rodríguez señaló que debido al corto tiempo de gobierno no se tiene previsto la construcción de nuevo penales, pese la sobrepoblación que existe en las cárceles.

Cabe recordar que tras el sismo fueron trasladados 324 hombres y 23 mujeres de los penales de Atlixco e Izúcar de Matamoros, mientras que del presidio de Chiautla de Tapia 32 reos abandonaron el inmueble para continuar su condena en el Cereso de San Miguel.