Jóvenes estudiantes de la Prepa Iberoamericana y comerciantes de food trucks guardaron un minuto de silencio y exigieron más seguridad en la zona después del asesinato de Estéfano Alvarado Granados, de 23 años de edad, quien era dueño de Chicken Waffles.
En el lugar colocaron una ofrenda y exigieron que cese la violencia afuera de la universidad Iberoamericana, ya que el pasado lunes Estéfano Alvarado fue acribillado cuando se encontraba en su restaurante de comida rápida. Hasta el momento la Fiscalía General del Estado no ha detenido a ningún sujeto, pese a que tienen identificadas a cuatro personas que participaron en el homicidio.
Los universitarios se vistieron de blanco y acudieron a la zona con flores blancas y veladoras para dejar la ofrenda en honor a Estéfano Alvarado y exigir justicia por la muerte del joven.
Cada joven que se acercaba a dejar su ofrenda dedicaba un mensaje en donde exigieron justicia por las muertes violentas en el país y por las que se han hecho en contra de la comunidad estudiantil.
“Somos una comunidad que pide justicia, que pide que la violencia muera y que la paz surja entre todos los corazones… Somos estudiantes y venimos por la paz. Somos la Ibero y pedimos por la paz”, mencionaron los universitarios.
Por otro lado, los trabajadores de la zona de comida pidieron a las autoridades tener más seguridad pues señalaron que después de los hechos ocurridos se sintieron preocupados.
Asimismo, pidieron al personal de la Ibero no prohibir a sus alumnos consumir en la zona pues no desearían que el lugar sea evitado ante los hechos ocurridos.
Cynthia Verdejo
@Diario_Cambio