Viernes, 19 de Abril del 2024

Armas, mansiones y leones: así es la lujosa vida de los capos más buscados de México

Jueves, 20 Septiembre 2018 12:48
Armas, mansiones y leones: así es la lujosa vida de los capos más buscados de México

Algunos de los más famosos narcotraficantes vivieron rodeados de múltiples lujos incluso dentro de la prisión.

Staff / Diario CAMBIO

@Diario_Cambio




Los más famosos narcotraficantes vivieron rodeados de los más exuberantes lujos, algunos incluso dentro de la prisión, y es que no se trata de cualquier personaje, sino de nombres del calibre de Guzmán Loera, Beltrán Leyva y Valdez Villarreal.


Recientemente, los medios han revelado cómo dichos personajes, sin pudor alguno, compartían en sus redes o al público el tipo de vida que se daban a costa de la ley (y a veces, bajo su cobijo).


Los Beltrán Leyva


Un testigo cuenta que esta familia se caracterizaba por el gusto que tenía por celebrar a lo grande con famosos grupos norteños, entre los cuales el cantante y compositor Ramón Ayala, El Rey del Acordeón, era uno de sus predilectos. Músico que incluso llegó a recibir de manos de los Beltrán obsequios como lujosos Rolex de diamantes o caballos pura sangre, además del pago por evento que recibía de su parte, que según se informa, oscilaba alrededor de los 40 mil dólares.
Otro de los grupos favoritos de los Leyva eran los Cadetes de Linares, quienes se vieron envueltos en una ocasión en un enfrentamiento entre los marinos y la familia de narcos, al ser descubiertos en una narcoposada por elementos de la PGR.


Joaquín Guzmán, El Chapo


El penal de Puente Grande, donde estuvo recluido de 1993 a 2001, fue como una más de sus casas: hacía fiestas en el patio, mandaba a pedir barbacoa, carnitas y bebidas alcohólicas.


Cuando no se encontraba haciendo este tipo de comidas, podía pedir lo que se le antojara de comer en la cocina, y es que al ser dadivoso se ganaba la confianza y favor de quien estuviera cerca de él.
Por otra parte, su hijo Iván Archivaldo no tenía mesura al compartir los lujos a los que estaba acostumbrado en redes sociales: automóviles de lujo, armas personalizadas, hasta leones.
Edgar Valdez Villarreal, La Barbie


Edgar Valdez Villarreal, uno de los criminales más poderosos y sanguinarios del país, con los medios que poseía, se podía tomar la libertad de cerrar cualquier local –incluso grandes antros en Acapulco, como el Baby’O- que le apeteciera para divertirse con sus socios y demás contactos e invitados, a quienes a menudo ofrecía costosos platillos y botellas cuyo precio ascendía a los 16 mil pesos.
Ramón Ayala también llegó a ser uno de los músicos más invitados a sus fiestas; sin embargo, famosos y hasta políticos o sus hijos eran muy allegados a los Villarreal.


Con todo esto, no cabe duda de que en un país como el nuestro, el dinero y poder pueden comprar hasta a las autoridades, hasta mezclarlas con aquello a lo que dicen combatir. Tal vez a eso se deba la actitud cínica que llegan a mostrar personajes como estos ante los medios cuando son capturados.




Fuente: LNN