Este viernes 15, suman cinco días de la clausura de la ampliación de la planta Cementos de México (Cemex), ubicada en el municipio de Cuautinchán, ya que  ésta no tramitó los permisos y licencias correspondientes de construcción ante el ayuntamiento.

Es importante mencionar que el alcalde Raúl Babines Pérez sostenía negociaciones con el gobierno del estado y representantes de Cemex en las instalaciones de Casa Aguayo.

La planta ubicada en el municipio de Cuautinchán, conocida como la Planta Cemex Tepeaca, es la más grande de América Latina y busca ser mayor productora a nivel mundial.

Sin embargo, el presidente municipal ha dejado claro que está de acuerdo con el desarrollo de la planta; pero declaró que la empresa debe cumplir con el proceso y cumplir según lo establece la ley.

El edil señaló que Cemex no cumplió con el Manifiesto de Impacto Ambiental (MIA), ya que el polvo que emana en la producción de cemento ha afectado la tierra del municipio, al grado de dejarla infértil

La Secretaría del Trabajo federal sabe del tema, sin embargo se ha mantenido al margen pues no ha emitido ningún comunicado.

El lunes 11 de noviembre, la Dirección de Obras Públicas, Desarrollo Urbano y Territorial de Cuautinchán determinó clausurar la obra y colocar sellos en las entredas a la fábrica.

Con estos sellos, no pudieron entrar 600 trabajadores, los cuales están a cargo de gestionar los hornos que operan con residuos de la Ciudad de México.

Además de los sellos, afuera de la planta hay una patrulla municipal que resguarda que efectivamente no violen los sellos de clausura.

Apenas unas semanas, el gobernador del estado, Luis Miguel Barbosa Huerta y directivos de Cementos Mexicanos anunciaron la expansión de la planta para convertirla en la número uno a nivel mundial.

Con información de La Jornada