Con mega pachanga, Manuel Gil tomó posesión como presidente municipal de Tepeojuma tras dos votaciones y diversas acusaciones de fraude electoral, así como de coacción del voto.
Los platos de mixiotes con arroz y frijoles circulaban entre los más de mil asistentes y la banda de música, la fiesta fue por el triunfo del primo del ‘narcoalcalde’ Rubén Gil, aunque muchos, como fieles acarreados, no sabían qué se celebraba pero estaban presentes.
Ahora, tras la toma de protesta, Manuel Gil tendrá que poner en marcha todas y cada una de las promesas de campaña, desde los problemas con los afectados por el sismo del 19 de septiembre hasta los apoyos al campo cañero.
En su mensaje, Gil García señaló que fue importante el apoyo de los ciudadanos por esta lucha incansable, incluso dijo que pensó que no sería presidente municipal. “Tengo en mi corazón las ganas de transformar Tepeojuma, de que las clases sociales más necesitadas sean beneficiadas por los recursos federales y estatales”, puntualizó.
El recién nombrado alcalde solicitó al gobernador Miguel Barbosa y al presidente Andrés Manuel López Obrador que sean los enlaces perfectos para que Tepeojuma pueda unirse a la Cuarta Transformación del país, por lo que exhortó a los ciudadanos a la unidad y la confianza para luchar en beneficio de la población.
La controversia
Cabe recordar que en octubre de 2018 la Sala Regional de la Ciudad de México del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) anuló la elección en Tepeojuma por presuntas boletas apócrifas y el manejo indebido de los paquetes electorales contra el Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Fue en una segunda vuelta de elección extraordinaria donde el Partido Revolucionario Institucional (PRI) impugnó las elecciones por presuntas irregularidades por parte del Movimiento Renegación Nacional (Morena), como la coacción del voto, tanto de Julián Peña, quien fungió como edil interino, y del diputado federal Gerardo Islas Maldonado, de Nueva Alianza.
Yessica Ayala / Tepeojuma
@Diario_Cambio