El presidente municipal de Huauchinango, Gustavo Vargas, releva al contralor municipal, Federico Escamilla, por no proceder con la denuncia interpuesta a su antiguo jefe, el ex edil Gabriel Alvarado Lorenzo, por el manejo indiscreto de recursos en la pasada gestión.

La remoción fue por la falta de seguimiento a una denuncia contra el ex alcalde municipal, esposo de la actual diputada local del Distrito 02 de Huauchinango, Liliana Luna Aguirre.

El alcalde Gustavo Vargas Cabrera solicitó la baja definitiva del contralor municipal, propuesta que fuera avalada por el cuerpo de regidores en sesión ordinaria de Cabildo.

Vargas Cabrera, edil actual, informó que la separación del cargo de Escamilla responde a que no hizo su trabajo y nunca inició el procedimiento administrativo para investigar el gasto público de la administración del ex alcalde Alvarado Lorenzo.

Fuentes señalan que Gustavo Vargas fue notificado de que el ahora ex contralor Federico Escamilla se reunió en sesiones privadas con el ex edil Gabriel Alvarado, motivo principal de su salida de la actual administración, pues el presidente municipal mencionó que dichas reuniones fueron un acto de traición.

Cabe señalar que Gustavo Vargas, desde que tomó posesión como presidente municipal de Huauchinango, se ha dado a la tarea de investigar el uso de los recursos en la administración anterior, luego de sospechar de malos manejos de los recursos públicos, obras inconclusas, así como desvío de dinero, por lo que Gabriel Alvarado Lorenzo interpuso una denuncia en contra del actual alcalde por difamación, asegurando que se cuenta con todos los documentos que acreditan su función pública.

Fuentes prevén que en próximos días seguirán los procedimientos legales para desmantelar la ola de corrupción que había en la administración pasada del ex edil Gabriel Alvarado Lorenzo y, como lo ha mencionado Vargas Cabrera, “Huauchinango no será rehén nunca más de las personas que se llenaron del dinero del pueblo”.