Por no dar respuesta en el combate a la delincuencia en el municipio de Chignautla destituyeron al director de Seguridad Pública, José Misael Lara Valdez, luego de la serie de robos, asaltos, asesinatos y balaceras que han ocurrido y que han puesto en jaque a las autoridades municipales, ya que no logran frenar la ola criminal que ya ocasionó malestar social.
Ante esta situación, el edil priista, Luciano Aparicio Rodrigo, tomó la decisión de darlo de baja ante las constantes quejas ciudadanas por el alarmante incremento de robos y asaltos que se han registrado desde que llegó al poder en octubre pasado.
Luego de no aguantar la presión social y la exigencia de mayor seguridad, el edil determinó despedir al jefe policiaco y analiza los perfiles de los uniformados, ya que se anunció que también podrían caer varios efectivos policiacos que tampoco han mostrado capacidad ni compromiso en su trabajo.
Desde que Luciano Aparicio llegó al poder empezó a incrementar el índice delictivo, los delitos de robo a transeúntes, casa habitación, negocios y asaltos a mano armada son denunciados de manera constante.
La población se queja además de que la Policía Municipal no responde cuando se denuncia un delito, ya que tardan horas en llegar al lugar de los hechos, incluso cuando son en el mismo centro de la población y a unas cuantas cuadras de la comandancia.
Otro delito que se está volviendo común en Chignautla es el robo de autos, motos y camionetas con mercancía; se han detectado bodegas con mercancía y con vehículos robados.
Los delitos que se cometían antes de la llegada del actual gobierno eran robos a transeúnte y riñas entre jóvenes pandilleros que se enfrentaban a golpes, principalmente los fines de semana, durante fiestas y bailes que se organizan en las comunidades.
Hasta el momento no han dado a conocer quién se hará cargo de la Policía Municipal y se espera que quien sea el nuevo director de Seguridad Pública logre disminuir los índices delictivos.
Carlos Rodríguez / Chignautla
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