Moisés C., Martín R. y Jairo Amado D., ingresar al Cereso de San Miguel en las próximas horas luego de que se les imputó el delito de homicidio en agravio del empresario Alfredo Colimoro Sarellano, cometido el pasado lunes en la colonia Anzures.

Dicho fallo fue logrado con ayuda de la juez de control que durante la audiencia celebrada este miércoles, resaltó las deficiencias cometidas por el agente del Ministerio Público al momento de integrar la carpeta de investigación, las cuales estuvieron a punto de permitir que la detención no fuera calificada de legal y se tuviera que liberar a los sospechosos.

Esta situación también fue aprovechada por la defensa pública de Moisés y Martín, que con una argumentación sólida que fue aplaudida incluso por la juez, evidenció errores en la elaboración del Informe Policial Homologado (IPH), así como en la teoría de flagrancia que pretendía imponer la Fiscalía.

A pesar de que eran múltiples los testigos que reconocían plenamente a Martín y a Moisés como los homicidas del empresario Alfredo Colimoro, el caso estuvo en duda y antes de resolver la legalidad de la detención, la juez tuvo que tomar un receso que se prolongó por más de una hora.

Aunque finalmente el fallo fue a favor del Ministerio Público, los tres detenidos se acogieron al término constitucional de las 144 horas y será en una segunda audiencia celebrarse los próximos días cuando se determine si son vinculados a proceso o no.

Durante ese tiempo los tres sospechosos deberán de permanecer en el Cereso de San Miguel ya que el delito que se les imputa es el domicilio calificado cuya única medida cautelar disponible es la de prisión preventiva.