En el tema de los extraterrestres, sus manifestaciones y posible existencia, para bien o para mal -no vamos a entrar en juicios de valor aquí- la referencia de los mexicanos es Jaime Mausán. Pero, ¿qué tal si les contáramos que ahora un científico de Harvard, la mejor universidad del mundo de acuerdo con todos los rankings, dijera que los seres de otros mundos sí existen.

Todo comenzó en 2017, cuando la noticia de la llegada del peculiar meteorito Oumuamua, considerado el primer cuerpo interestelar que llegó a nuestro Sistema Solar. Entonces el objeto y su singular forma le dieron la vuelta al mundo, pero hubieron dos académicos que fueron todavía más lejos.

Fueron los especialistas Shmuel Bialy y Abraham Loeb, investigadores para el Harvard Smithsonian Center for Astrophysics, quienes afirmaron que el Oumuamua podría tratarse de una nave alienígena. Entonces, el artículo fue severamente criticado por la comunidad científica, pero Loeb insiste en su improbable teoría.

Y es que el Profesor Loeb fue entrevistado por el medio español ABC y aprovechó la oportunidad para afirmar que su idea no es del todo descabellada:

“Sospecho que las civilizaciones son muy efímeras. En otras palabras: que no son muy cuidadosas con su planeta, y al final acaban destruyéndose a sí mismas, ya sea mediante guerras nucleares, por los efectos de sus acciones sobre el clima o por la destrucción de su entorno”, asegura el académico.

Loeb, de 57 años, respondió a otras preguntas sobre cómo sería nuestro encuentro con extraterrestres y afirma que los humanos no haremos contacto con un civilización alienígena “viva”, sino que hallaremos “sus restos nada más”.

Aquí es donde afirma que el Oumuamua es uno de esos restos de una civilización extraterrestre:

Recientemente ha formulado usted en la revista Astrophysical Journal Letters la hipótesis de que los primeros extraterrestres ya están aquí. ¿En serio?

-Sí. El 19 de octubre de 2017, el telescopio Pan-STARRS, en Hawái, registró un objeto extraño en el firmamento. Se movía tan rápido que solo podía proceder de algún lugar fuera del sistema solar. Se trata de la primera visita que nos llega del espacio exterior de la que tengamos conocimiento. Se lo bautizó con el nombre de ‘Oumuamua.

Fuente: UnoCero