Recientemente una joven llamada Yvette Harvie-Salter fue expulsada de una alberca pública, a la que acudía hasta dos veces a la semana, porque según el juicio de la directora del lugar, su bikini era “inapropiado”, además de causar molestias a otros visitantes; los hechos sucedieron en Auckland, Nueva Zelanda, en donde ella reside.

La joven contó que ella disfrutaba de su día cuando la encargada del complejo deportivo la llamó para tener una conversación, en privado, con el objetivo de indicarte que otros visitantes estaban incómodos por su bikini, aparentemente demasiado revelador.

Incluso Yvette fue cuestionada sobre si poseía otros trajes de baño en casa para poder usarlos de manera pública, esto pesar a que ella aseguró que durante meses había acudido con las mismas prendas a nadar a la alberca de siempre y nunca antes había tenido problemas.

Además, Yvette mostró en redes sociales cómo es el traje de baño por la que la expusieron y humillaron en su lugar recreativo favorito.

Por lo anterior, la encargada dejó claro que no había un reglamento sobre la vestimenta dentro de las instalaciones, sin embargo, aún así la joven de 26 años y su novio fueron echados del lugar.

Cuando Yvette y su novio tomaron sus cosas para irse, exigieron la devolución del dinero que pagaron por ingresar, pero el personal se burló de la petición, cuando fue la misma administración del lugar quien negó el servicio de manera injustificada y les causaron molestias.

Fuente; Radio Fórmula