La mesa principal de la comida de la victoria en el Centro Expositor fue kilométrica, nada raro en una campaña marcada por el efecto del ‘rayo reconciliador’ de Luis Miguel Barbosa, quien una semana después de su triunfo citó a su estructura electoral, ‘cuarto de guerra’, familia, alcaldes y sólo un empresario consentido: Javier Pacheco Pensado.

Al Centro Expositor llegaron más de seis mil operadores de todo el estado, y todos cupieron, incluso los ‘armentistas’ más conspicuos. De todo el universo de Juntos Haremos Historia, sólo fueron excluidos José Juan Espinosa y Héctor Alonso.

Tampoco se vio por ahí a Nancy de la Sierra, ausente en solidaridad por el castigo a su esposo, y Alejandro Armenta, quien envió como representantes a sus diputados Yadira Lira, Raymundo Atanacio y algunos de sus coordinadores distritales.

Ubicado justo al centro de una mesa kilométrica en la que lo acompañaron ediles, legisladores locales y federales, Barbosa Huerta vivió el asedio de propios y extraños, pues aun cuando éste se disponía a comer las carnitas que ofrecieron en el Centro Expositor, decenas de personas se postraron frente a él y detrás de una valla de seguridad improvisada buscando fotografiase a su lado o incluso para tomarse una selfie con el gobernador electo de fondo comiéndose un taco.

Junto al virtual gobernador, su esposa ‘Charito’ e hijos. Al lado derecho de ellos, Javier Pacheco Pulido con su esposa, el empresario que se la jugó desde 2018, y del lado izquierdo, Gabriel Biestro, erigido en el principal operador político del ex senador.

Llegan los traicioneros y los buscachambas

Apenas unos minutos después de haber terminado de comer, una avalancha de personas invadió la parte posterior de la mesa principal para codearse con el gobernador electo.

Lo mismo se aparecían por ahí priistas que se infiltraron en la campaña de este año como Javier López Zavala, Maritza Marín Marcelo y Leobardo Soto Martínez, acompañado de Erika Díaz Flores; que sus fieles diputados que desde el proceso electoral pasado y durante la lucha contra el fraude electoral que éste encabezó lo acompañaron, como Gabriel Biestro Medinilla, Mónica Lara Chávez, Emilio Maurer Espinosa, Olga Lucía Romero Garci Crespo, Tonantzin Fernández Díaz y Leonor Vargas Gallegos.

Pese a que al principio dicha comida estaba prevista para sus principales operadores y más cercanos colaboradores, ex priistas, ex morenovallistas se colaron para festejar al lado de Miguel Barbosa como si hubieran logrado una gran labor en la suma de votos, ya que el abanderado de Juntos Haremos Historia obtuvo poco más de 650 mil.

Todos y cada uno, fieles escuderos y advenedizos, querían estar ahí para saludarlo en la búsqueda de una fotografía para presumir más adelante y en cualquier oportunidad posible.

Pese a todo, Miguel Barbosa se dejó consentir por todos aquellos que consideró lo apoyaron durante la campaña, sin importar su origen partidista o incluso si se sumaron apenas hace un par de meses en el arranque de la pasada campaña.

Además, como parte de los resultados del ‘rayo reconciliador’ a esta comilona también se presentaron otros presidentes municipales ajenos a los partidos de Juntos Haremos Historia como el de Quecholac, Alejandro Martínez Fuentes postulado en el proceso electoral pasado por el PSI; el de Teziutlán impulsado por el morenovallismo, Carlos Peredo Grau o el edil de Huehuetlán El Grande recientemente ‘levantado’ y emanado de las filas del PRI, Ángel González Carpynteiro.

Incluso una señora se ‘coló’ por debajo de las mesas para aparecer en la foto que un grupo de ediles se acercó a pedirle a Miguel Barbosa, nadie quería perderse esta oportunidad en medio de su festejo.

Estrena saludo como símbolo de la 4T en Puebla

Asediado por su fans que lo rodearon como rockstar en la búsqueda de la foto del recuerdo y tras un pequeño altercado con una mujer que se acercó a la mesa principal en la que estaba ubicado para reclamarle porque no le habían servido de comer, Miguel Barbosa pidió a su equipo de colaboradores despejar el área para emitir el mensaje de agradecimiento a las más de cinco mil personas que se dieron cita para apapacharlo ya como gobernador electo.

En medio de la euforia por la victoria obtenida, Miguel Barbosa presentó, el que dijo, será el saludo que identifique a la Cuarta Transformación y la administración de cinco años y medio que encabezará en la entidad poblana como titular del Ejecutivo.

Entre gritos de júbilo pidió a los miles de asistentes que se dieron cita para festejar su triunfo alzar la mano con cuatro dedos levantados como símbolo de la Cuarta Transformación en Puebla.

“Nuestro saludo va a ser este, la mano derecha o izquierda, la que ustedes quieran en alto y con cuatro dedos arriba. Este es el saludo y despedida entre nosotros por lo próximos cinco años y medio, Cuarta Transformación”, externó.