Francisco Martínez Alpízar, catedrático investigador de la BUAP y doctor en derecho laboral, rechazó que Abelardo Cuéllar Delgado, futuro titular de la Secretaría del Trabajo, pudiera incurrir en un conflicto de interés al ocupar la titularidad de dicha dependencia después de haber defendido a ex empleados del gobierno estatal ‘corridos’ durante el morenovallismo, así como a trabajadores de la BUAP ante la Junta local de Conciliación y Arbitraje que estará a su cargo.

“No existe conflicto de interés. Casi todas las contralorías de las entidades federativas han determinado que un conflicto de intereses es cuando un interés laboral, personal, profesional, familiar o de negocios del servidor público pueda afectar el desempeño imparcial objetivo de sus funciones. En el presente caso, el abogado Abelardo Cuéllar asesoró y orientó a trabajadores de la BUAP y a trabajadores burócratas despedidos en el sexenio de Moreno Valle, por lo tanto estamos hablando que de esto hace más de ocho años. También debemos separar que no es lo mismo asesorar y orientar que ser apoderado legal de los trabajadores, y tengo entendido que en algunos asuntos donde Abelardo Cuéllar Delgado aparecía como apoderado, desde hace ya bastante tiempo a la fecha ha renunciado al mandato conferido al mismo y este solo hecho lo libera de cualquier vínculo con los trabajadores”.

Martínez Alpízar recordó que en agosto de 2012 se documentó a través de los medios de comunicación que en el tribunal burocrático del estado de Puebla tenía como magistrado presidente a Rodolfo Ramos, y desde esas fechas “cayó la maldición de retardar, archivar, extraviar y congelar casi todos los expedientes donde eran actores los trabajadores burócratas despedidos en el sexenio de Moreno Valle, y nunca se resolvieron”, por lo que ahora se tiene la posibilidad de corregir esos yerros y aplicar verdaderamente la justicia laboral.

En cuanto a las versiones de las supuestas 70 ‘cabezas’ que pretende ‘cortar’ Cuéllar Delgado de la Secretaría del Trabajo, el investigador y académico de la BUAP aseguró que dicha versión es falsa, pues no es la forma de actuar del abogado.

“Yo dudo que Abelardo Cuéllar, al que conozco desde hace mucho tiempo y sé de la pulcritud con la que se conduce, haya pedido la renuncia de esas setenta personas, yo dije la vez anterior, y lo sostengo, que Abelardo Cuéllar como secretario del Trabajo tiene perfectamente definido y estudiado al factor laboral en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, Tribunal de los Trabajadores al Servicio del Estado y Procuraduría de la Defensa del Trabajador, porque conoce las raíces de estas dependencias, y en el supuesto no consentido que si les hubiera pedido su renuncia a todos, está en todo su derecho, máxime que casi todos los trabajadores son de confianza con exclusión de cinco o seis que son sindicalizados”.

Hizo énfasis en que precisamente el Tribunal de Arbitraje de los Trabajadores al Servicio del Estado casi en todas sus resoluciones (Laudos) ha determinado que los trabajadores de confianza no tienen derecho a la estabilidad en el empleo y menos a la reinstalación, “estas son las vueltas que da la vida, pues dicho tribunal ‘cavó su propia tumba’ porque en realidad todos los laudos que ha dictado y sigue dictando son en contra de los trabajadores burócratas que hoy en día son ellos mismos, los de Conciliación y Arbitraje y los de la Procuraduría de la Defensa del Trabajo, por lo tanto va a sufrir en carne propia las aberraciones cometidas, como son el retardo en la impartición de justicia, la imparcialidad e incapacidad para resolver conforme a derecho”, dijo.

Francisco Martínez señaló que ante estas irregularidades graves que se registran en la dependencia, es necesario que el nuevo secretario del trabajo inicie una limpia en las dependencias antes indicadas, reestructurar con gente nueva que demuestre su capacidad a través de un examen para ocupar esos puestos.

“Porque déjame decirte que en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, tiene ocho juntas especiales, seis en Puebla, una en Tehuacán y otra en Teziutlán.  En Puebla hay una Secretaría General y una oficina de Amparos. (Los conciliadores que debería haber se extinguieron hace muchos años) en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje en Puebla no hay más de cuarenta personas trabajando, de todos estos, sólo hay un trabajador sindicalizado, hay más de cinco actuarios que trabajan por honorarios, y que éstos ganan cuatro mil pesos al mes, y que en su contrato tienen una cláusula que renuncian al derecho de la seguridad social. (En casa del herrero cuchillo de palo), la única de que gana más de 40 mil pesos mensuales es la presidenta de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje en el Estado, vaya desproporción salarial entre la presidenta y los actuarios, y trabaja más un actuario que la presidenta”.

Señaló que por estas razones debe haber una ‘limpia’, rescatando a dos que tres personas por la expertis y honestidad con la que se han conducido; y todos los demás así como llegaron deben irse, y por lo que no se les violenta ningún derecho laboral al pedirles su renuncia.

El investigador de la BUAP aclaró que muchos de los trabajadores no tuvieron la culpa de las irregularidades que se cometieron, pues fueron ocupados como emergentes o comodines por órdenes de la presidenta en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, por órdenes del Magistrado presidente en el tribunal de los Trabajadores al Servicio del Estado y en la PRODET por el titular de la misma.

“Para muestra un botón, en la Junta Especial Dos de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, una señorita que estaba (como muchos están al margen de la Ley) practicando o ayudando a un actuario sin tener el mayor conocimiento en materia laboral, de pronto la ponen como secretaria de Acuerdos; pobre niña, ni idea tiene de lo que está haciendo, menos conoce la Ley Federal del Trabajo, nunca sabe dónde se encuentran los expedientes que debe atender, carece de cedula profesional y título, pero por órdenes de la presidenta de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, fue a ocupar ese lugar”.

Señaló que hay muchos casos peores de personas que ocuparon puestos relevantes sin tener conocimientos ni título profesional “por eso la ‘limpia’ que debe hacerse por el secretario del Trabajo en esas dependencias, para que las plazas sean ocupadas por personas comprometidas con la función pública en materia laboral, gente que esté capacitada y que se siga capacitando para ello, porque como se encuentran ahora dichos tribunales laborales, es un desastre y un burla para la Justicia Laboral que en otros tiempos fue de las mejores entidades en la impartición de la misma. Recordemos que hace mucho tiempo, el Gobierno del Estado les pago las maestrías casi a todos los que trabajaban en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, unos la desaprovecharon pero fue problema de ellos”

Martínez Alpízar insistió en que la designación que ha hecho el gobernador electo Miguel Barbosa al designar a Cuéllar Delgado como secretario del Trabajo, así como la designación y nombramiento de su gabinete, son muy acertados “y creo que el señor gobernador electo hizo un análisis y un estudio muy profundo en cada persona de su gabinete, en Abelardo Cuéllar Delgado resalta que ha sido toda su vida un laboralista honesto y un excelente luchador social, como litigante conoce las deficiencias, carencias y abusos corrupción en la impartición de Justicia Laboral en los sectores ya indicados”.

—¿Es real que Abelardo Cuéllar Delgado como secretario del Trabajo que tiene más de cien asuntos de trabajadores burócratas y ciento cincuenta de la BUAP?

—Esta información la leí en una columna, pero creo que con relación a su nota está un poco mal informado, porque en el supuesto no consentido de que fuera cierto número de asuntos que indica, hay que ver que estos asuntos, porque en su mayoría son de mucho tiempo atrás, los de trabajadores burócratas son del primer año del sexenio de Moreno Valle y los de la BUAP se han acumulado en esa cantidad, si es que fuera cierto, debido a que con plena certeza te digo la junta especial número cinco de la Local de Conciliación y Arbitraje ha sido un obstáculo para resolver los asuntos laborales de la BUAP, porque lejos de darles trámite, los ha ido retardando injustificadamente a mas no poder con ‘chicanas’, como son esconder los expedientes, nunca emplazar a la BUAP, fechas lejanas a más de cinco meses. En conclusión, nunca siguen la prosecución que les mandata la ley federal del trabajo, por lo tanto, lejos de beneficiar a la BUAP la han perjudicado enormemente, porque hay expedientes que llevan más de diez años y no se han podido resolver, entonces aunque fuera cierto el número de asuntos, diríamos que es imputable a la autoridad laboral por querer proteger algo que a sabiendas que tarde que temprano se tendrá que resolver, ya sea con Abelardo Cuéllar Delgado o con cualquier otra persona en la Secretaría del Trabajo.

Señaló que el problema de que existan tantos asuntos sin resolver en el tribunal de los Trabajadores al Servicio del Estado y en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje del Estado en particular los de la BUAP, “es imputable a la propia autoridad aunado a la deficiencia en la defensa legal que se ha hecho de cada asunto, ejemplo en donde todos los organismos públicos descentralizados son demandados, la defensa de estos hay veces que ni llega a las audiencias, y cuando llegan no saben litigar en materia laboral, y cuando esto pasa no sé de donde sale la orden, pero se protege a los mismos en ese momento, siendo erróneo tal proceder porque esto no puede ser por siempre, ya que de una forma u otra tendrá que resolverse el asunto”.