La Organización Panamericana de la Salud (OPS) informó que aun cuando nueve potenciales vacunas contra el covid-19 se encuentran en la fase tres de desarrollo, es importante y necesario contar con estudios en al menos 30 mil voluntarios para obtener resultados de su eficacia y seguridad.

 Si bien, aclaró Jarbas Barbosa, subdirector de la OPS, la vacuna que desarrolla AstraZeneca volvió a los ensayos clínicos tras demostrarse que el efecto secundario detectado en el paciente nada tuvo que ver con el inmunológico, todo ensayo puede tener más de una pausa indicada por un comité independiente.

 “La fase tres es la más compleja porque requiere que se involucren alrededor de 30 mil o más voluntarios, y lleva tiempo obtener los resultados”, dijo Barbosa tras referir que esos pasos de los protocolos son necesarios para que se suministre una vacuna nueva en humanos.

En videoconferencia, Barbosa también comentó que el 18 de septiembre vence el plazo para que México y, otros países de la región, firmen el compromiso de compra anticipada de la vacuna contra el covid, entre las que se encuentran, esas nueve posibles candidatas.

“Todos los países de la región, con excepción de Estados Unidos, firmaron cartas de intención para formar parte del mecanismo Covax y, ahora, tienen hasta la fecha del 18 de septiembre para firmar este nuevo compromiso. Algunos países están planteando alargar ese plazo”, comentó.

El mecanismo denominado covax “consiste en captar recursos de donantes para que los países pobres y los pequeños mercados en el mundo puedan recibir la vacuna sin necesidad de pagar”.

Se beneficiarán, dijo, diez países de América Latina y el Caribe y, en el caso de México, Brasil, Argentina y Chile, obtendrían el beneficio de pagar la vacuna a precios accesibles.

Sobre el exceso de mortalidad durante la transmisión del covid-19, comentó, que la OPS sugirió a diversos países de la región hacer esta estimación y México ha sido de los primeros en publicar sus datos, en específico, la Ciudad de México.

“Es importante aclarar que el exceso de mortalidad no solamente ocurrió en América latina, sino también en Estados Unidos y en países de Europa. En todos se ha identificado durante el pico de la transmisión, una mayor velocidad del virus que sobrepasa la capacidad de registro de buenos sistemas de información como es el caso de México”, comentó.

Con información de: Milenio