Anteriormente se había previsto una caída del 40% sin embargo con estrategias para impulsar la venta: Día del Super Niño y la campaña de El Buen Fin, sólo caerá un 15 por ciento.

Miguel Ángel Martín González, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria del Juguete (Amiju), comentó que gracias a estas estrategias comerciales lograron reducir de 40 a solo 15 por ciento su estimación de reducción anual en ventas.

“Este año tuvo claroscuros con partes buenas y nada buenas, la parte buena es que el comercio electrónico tuvo un despegue importante, pasó de 5 a 15 por ciento de las ventas anuales, pero por otro lado el mercado tradicional se contrajo 38 por ciento”, comentó.

Ahora espera que la temporada navideña, que incluye la celebración del Día de Reyes, pueda ayudar a la industria porque ya hay mejores perspectivas del mercado.

“El juguete es un producto de primera necesidad en muchos hogares con niños, es parte de los momentos de la alegría y formación, así lo consideran muchos países en el mundo (…) En una perspectiva optimista esperamos lograr este año una pérdida en ventas de 15 por ciento”, explicó.

También dijo que la pandemia cambió las cadenas de suministro de las empresas que manufacturan juguetes en China para venderse en Estados Unidos, por lo que México se convierte en una base relevante para la atracción de estas líneas de producción que antes estaban en el país asiático.

Fuente: El Financiero