En Puebla la función de López Salazar estará bajo reflectores políticos y mediáticos que de ninguna manera tuvo en Chiapas.
Puebla enfrenta el escenario más complejo de los últimos años. Los movimientos feministas fueron la chispa que encendió la pira de la indignación social. Pero luego de los lamentables hechos de Huejotzingo los universitarios poblanos tomaron la estafeta de la protesta y crearon el movimiento juvenil más fuerte del país.
Alumnos de diferentes instituciones han creado un órgano cúpula: ‘El Comité Estudiantil Interuniversitario’ que propondrá y exigirá al gobierno estatal estrategias sólidas en contra de la delincuencia.
El movimiento estudiantil va para largo, no deje de observarlo. En algunas instituciones el cauce ya se salió de control, vemos el caso concreto de la Universidad del Valle de Puebla (UVP) o en la misma BUAP donde Alfonso Esparza pide que se suspenda el paro indefinido.
Los universitarios no cederán fácilmente; a cambio pedirán formales compromisos tanto de las autoridades académicas como del gobierno estatal.
Se anuncia una megamarcha para el día jueves 5 de marzo. Las acciones de resistencia cada día son mejor organizadas y coordinadas.
Este movimiento será uno de los ejes torales, centrales que el gobierno de Barbosa Huerta deberá atender de manera especial y directa, tal y como hace con sus audiencias ciudadanas.
Este es el punto en el que deberá aplicarse la mayor sensibilidad social y política.
Puebla tiene muchos ejemplos de crímenes de estudiantes que estremecieron a la sociedad. Recordamos que en enero de 2001, durante el sexenio de Melquiades Morales Flores, ocurrió un homicidio que sacudió a la Angelópolis. El secuestro y asesinato de Marisol Catalán Zamora fue probablemente el primer caso de su tipo en la historia contemporánea.
Desde entonces, otros casos han cimbrado la entidad. En años recientes, durante el breve periodo de Tony Gali Fayad ocurrió el asesinato de María Fernanda Castilla que tuvo una resonancia nacional.
Es imposible que una administración estatal pueda vigilar a todos los universitarios.
Pero si es posible que construya las condiciones para formar una fiscalía sólida, atingente, sensible a las demandas universitarias. Desde este momento se deben tender todos los puentes con la comunidad estudiantil.
Esa es la gran responsabilidad para la administración estatal.
Dulcería poblana
Leobardo Soto actúa ante la caída de su lideresa en Tehuacán
Se llama Ivonne Morales Luna, hasta hace unos días era la dirigente del Sindicato de Trabajadores del Ayuntamiento de Tehuacán; era el dedo chiquito de Leobardo Soto en aquella ciudad. En días recientes Ivonne fue destituida mediante un recurso ante el Tribunal de Arbitraje del Estado. Ahora Leobardo dice que van a interponer un amparo, pero sólo está actuando. Sabe que la orden se dio desde Casa Aguayo y que ante eso, poco, muy poco puede hacer.
Como siempre, quedo a sus órdenes en Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.