Cuando el mismo gobernador Barbosa Huerta reconoce la posibilidad de que la familia Valencia busque volver a la escena pública en las elecciones de 2021, es un síntoma de la dimensión del monstruo.

 

Textualmente señaló: “Pueden regresar a buscar candidatura en Venustiano Carranza”, refiriéndose al clan que fue protegido y cobijado por el PAN morenovallista, el mismo que ahora enarbola Genoveva Huerta.

 

En Cúpula lo hemos subrayado en varias ocasiones; ni los Valencia, ni Nacho Salvador son los únicos ediles coludidos con la delincuencia organizado. En el pasado reciente fueron decenas los que se entregaron a un amasiato con redes criminales.

 

En Casa Puebla lo sabían, pero aquellos alcaldes habían firmado el programa “Peso sobre peso” que los convertía en intocables; los informes sobre la protección que dieron a bandas de huachicoleros, asaltantes en carreteras, narcomenudistas, todo eso era omitido,

soslayado.

 

Mientras los ediles compartieran sus recursos financieros eran intocables. Y los resultados fueron el surgimiento de decenas y decenas de bandas que aún hoy siguen operando con diferentes cabecillas.

 

Todos esos alcaldes, sus familias y sus grupos, trabajaron para el albiazul en las elecciones de 2018. A ese grado llegó la descomposición.

 

La tarea de cortar esa hierba nociva se prolongará en los años por venir.

 

Miscelánea poblana

 

Claudia Rivera víctima de esquizofrenia política

 

La definición señala que la esquizofrenia consiste en: “alteraciones de la personalidad y pérdida del contacto con la realidad”.

 

En honor a la verdad no hay mejor descripción para el proceder de la alcaldesa Claudia Rivera Vivanco, quien de momento se altera; arma shows; saca videos beligerantes; se pinta de catrina; un día sale a limpiar el piso en el Centro Histórico; asegura que los baches son un problema “mediático” y afirma que ha disminuido la delincuencia en un 40 por ciento y que realiza una gran labor en las juntas auxiliares.

 

Todos son síntomas inequívocos, indiscutibles de una desconexión con la realidad.

 

La señora es incapaz de hacer el más pequeño ejercicio de autocrítica. Para ella su Ayuntamiento es el más eficiente del país, aunque las mediciones arrojen exactamente lo contrario. La presidenta vive una realidad alterna, completamente ajena a la que padecen los poblanos. Y en estas condiciones busca la reelección. Es un desastre esférico, por donde se vea.

 

Sus asesores, si fueran reales, deberían exhortarla, conminarla a realizar un ejercicio de análisis, de crítica al interior de su despacho. Pero lejos de eso, la llenan de adulaciones y ahí están los resultados.

 

Pérez Popoca aclara versiones.

 

La presidenta Karina Pérez Popoca desmintió que en San Andrés Cholula se trabaje con impunidad y favoritismos. Al aclarar que el proceso para la adquisición e instalación del sistema Integral de Videovigilancia y Monitoreo Urbano, el procedimiento de adjudicación directa fue aprobado mediante el Cabildo el día 6 de mayo del 2020, en virtud de ser de un tema de seguridad pública, interés y atención inmediata para garantizar la tranquilidad de las familias del municipio; así como haberse declarado desierta la anterior convocatoria.

 

Por su parte, el secretario de Gobernación, Sergio Mirón Terrón, dio a conocer que el pasado 12 de septiembre de 2019 se hizo pública la convocatoria de licitación CMA-SACH-LPN-016/2019 para el servicio en la cual participaron las empresas Ska Tracking and Security SA de CV, Total Play SA de CV, así como E-Tek Proveedores en Informática y Servicios SA de CV, y ésta última presentó la propuesta económica más baja; sin embargo, debido a que todas las propuestas rebasaban la suficiencia presupuestal de 38 millones de pesos, el pasado 16 de octubre de 2019 se emitió el fallo de dicha convocatoria en el que se declaró desierta.

 

Como siempre, quedo a sus órdenes en  Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.