La intentona de cobijarse en el Secretario de Seguridad Pública federal Alfonso Durazo Montaño tampoco prosperó. La presidenta no fue recibida por el titular y enviaron a un personaje de tercer nivel a darle atención de ventanilla.

 

Ni el recurso ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ni la súplica al gobierno federal le sirvió. Rivera Vivanco ha perdido el control del aparato de Seguridad Pública municipal y nada puede hacer ante ello.

 

Los mariachis callaron. La presidenta ya no hizo videos y tampoco envió a sus ‘tamagotchis’ a hacerle coro.

 

La derrota fue jurídica y política.

 

El agravio, la grosería y el desafío que públicamente exhibió la alcaldesa nunca serán olvidados por el gobernador Barbosa, quien en tono armonioso declaró que no son tiempos de confrontación.

 

Pero es claro que la actitud retadora de Rivera -tarde o temprano-, habrá de desembocar en delicadas consecuencias para su administración. Desde este momento deben anticiparse formales procesos penales en contra de sus más cercanos colaboradores.

 

El tema de los bolardos es inevitable y forzoso. 

 

El huésped de Casa Aguayo ha mostrado que siempre está dispuesto a tender la mano. Con Felipe Patjane así lo hizo; entre regaños y reprimendas lo exhortaba a realizar un buen gobierno.

 

Pero en política hay líneas muy definidas que al cruzarse no tienen retorno. Y Claudia Rivera rompió el frágil hilo de la armonía y la sensatez. Cayó en una provocación innecesaria que colocará a su gestión en un brete aún mayor.

 

Dentro de los muros del Charlie Hall se asegura que fueron los ‘asesores’ los que llevaron a la edil al punto sin retorno; al grado de destrozar la relación con el gobernador.

 

La hundieron como la peor munícipe en la historia de Puebla y todavía la convirtieron en una pandillera retadora.

 

Grave la situación, pero más graves serán las consecuencias. Al tiempo.

 

Dulcería poblana

 

Sobre Felipe Patjane, el edil no tiene para cuando salir.

 

Y ya que mencionamos el caso del edil de Tehuacán Felipe Patjane Martínez, nuestras fuentes nos indican que no tiene para cuando salir del Cereso de Tehuacán.

 

Sus nuevos abogados ganaron un amparo para la ‘Reposición del proceso’; es decir que el juicio vuelve a comenzar, como si apenas hace unos días lo hubieran detenido.

 

A cuatro meses de su captura en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, todo el proceso vuelve a iniciar.

 

Las pruebas en su contra son demoledoras, por lo que solamente con la reparación del daño, es decir reintegrando el perjuicio patrimonial podrá obtener su libertad.

 

Por eso decimos que cuando se desatan las consecuencias ya no hay quien las pare.

 

Un correo sobre el oscuro comandante del penal de San Miguel

 

Una fuente confiable nos envía un correo electrónico sobre uno de los nuevos jefes del penal de San Miguel.

 

“El Comandante Francisco Hernández Doroteo, titular de los Custodios en San Miguel fue acusado por una serie de elementos.

 

Varios de los custodios que se encontraban a su cargo fueron removidos y rotados a otros penales.

 

Aún permanece en el cargo a pesar de que existen varios de los custodios que lo identifican como quien les daba indicaciones directas para pasar cosas prohibidas. Entre las cosas prohibidas se encontraba alcohol, distintas drogas, aparatos electrodomésticos.

 

¿Quién lo protege? 

 

Ojalá se investigue, porque este comandante ya fue a saludar a Eukid Castañón.

 

Como siempre quedo a sus órdenes en Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.