Martes, 16 de Abril del 2024
Indicador Político

En agosto de 2008 se firmó un Acuerdo Nacional de Seguridad que establecía la necesidad urgente de capacitar a policías estatales y municipales para combatir a un crimen organizado que se había colado precisamente cooptando a esos niveles policiacos.

A lo largo de cuatro partes, aquí se ha tratado de analizar el escenario de desafío de la 4T de cara a la herencia neoliberal de Carlos Salinas de Gortari (1979-1994). El punto central se puede plantear así: el neoliberalismo no es ideología, sino un modelo de desarrollo nacional y un Estado subsidiario.

Las reformas constitucionales de febrero de 1983 del presidente De la Madrid transitaron a México del Estado social al Estado neoliberal de economía empresarial de mercado. El ideólogo de esa reforma fue Carlos Salinas de Gortari, secretario de Programación y Presupuesto.

Si la 4T lopezobradorista quiere avanzar en la anulación del modelo neoliberal salinista y construir una nueva economía de bienestar social, tendrá que entrarle de lleno a la reforma del artículo 25 constitucional que definió De la Madrid en 1983, y que tuvo tres objetivos neoliberales: regresar la economía mixta que quebró la expropiación de la banca, sentar las bases para la privatización de empresas públicas y darle rango constitucional a la empresa privada que vive de las utilidades especulativas y no del servicio social.

A lo largo del periodo revolucionario-posrevolucionario 1911-1982, los giros de proyectos presidenciales se centraron en tres variables: las reformas constitucionales, la caracterización del Estado y la ideología. La contrarrevolución neoliberal de Carlos Salinas de Gortari operó sobre esos tres pivotes para liquidar a la Revolución Mexicana y edificar una la transformación estructural e ideológica de tipo neoliberal.

En una charla con su fan Epigmenio Ibarra, el presidente López Obrador aceptó que su propuesta de Cuarta Transformación no es una reforma y es una revolución. Y de nueva cuenta centró el eje de la 4T en la lucha contra la corrupción, cuando toda revolución, quiérase o no, es producto de lucha de clases.

Las evaluaciones del Banco de México son como las llamadas a misa: las atienden quienes se interesan en ir a la iglesia. Sin embargo, todos debieran estar atentos a las campanadas y preguntarle al vecino qué se dijo en la misa.

Presionado por la economía estadounidense a la que está atado, por el desempleo en modo Calcuta de millones de trabajadores que no han recibido apoyo y por una planta productiva que se pone en funcionamiento o se destruye, la decisión gubernamental para regresar a la nueva-vieja normalidad económica y social tendrá que resolver cuatro dilemas:

La clave de la felicidad se localiza, como punto central en el trabajo con prestaciones sociales y salario remunerado; es decir, que el trabajo sea fecundo, creador, y genere dicha y bienestar para el trabajador y su familia.

El populismo región 4 de Venezuela con Hugo Chávez y Nicolás Maduro ha sido una venta de expectativas demagógicas; en octubre del 2013 Maduro anunció la creación de un Viceministerio para la Suprema Felicidad del Pueblo, pero al final esa oficina quedó en una instancia burocrática sólo para atender solicitudes ciudadanas de ayudas.

La fórmula de la felicidad del pueblo sería la siguiente:

El gran debate dentro del gobierno y entre los factores de la producción no es el coronavirus, sino el proyecto económico posneoliberal convocado sin definirlo. Ahí, en esa discusión, se está jugando su suerte el gobierno de la 4T.

Las tres preguntas que se tienen que hacer sobre las acciones de las fuerzas armadas en labores de seguridad pública en modo de seguridad interior, son las que no se quieren hacer: si no son los militares, entonces quién garantizará la seguridad del Estado y la sociedad; la razón de la existencia de los militares y marinos es la seguridad y a eso irán; y cuál sería la alternativa inmediata, ya, para combatir el reflujo de las bandas criminales.

La campaña contra las fuerzas armadas en tareas de seguridad pública en grado de seguridad interior quiere dejar al Estado, al gobierno y a la sociedad a merced de la delincuencia en todos sus niveles. Las cifras en aumento de la inseguridad y los delitos son un aviso de que la actual estructura de seguridad pública ha sido rebasada por la criminalidad y que se requiere de un dique de contención.

A pesar de que aún debe determinarse de manera oficial si el pequeño cartel en La Huacana, Michoacán, es real o pantomima, de todos modos su comunicado tiene elementos para revelar una crisis declarada de seguridad interior, porque anuncia el posicionamiento criminal de una parte de la soberanía territorial del Estado nacional.

Sin tener suficientes datos sobre su capacidad real de fuego, su control dominante de zonas territoriales, su configuración real de efectivos, sus objetivos específicos como banda delictiva y sus acuerdos específicos con el Cártel Jalisco Nueva Generación, la aparición del grupo armado Cartel Zicuirán Nueva Generación en La Huacana, Michoacán, prendió focos de alarma en el mapa regional de seguridad del Estado federal.