Jueves, 28 de Marzo del 2024
Martes, 12 Mayo 2020 02:25

Esta historia continuará…

Esta historia continuará… Escrito Por :   Anabel García Morales

Hay cintas que atrapan, que inspiraron a ser superhéroe a tu abuelo, luego a tu papá y ahora tú coleccionas esos mismos personajes.


 

Que el sólo hablar de ellos te hace iniciar un tema de conversación y te abre contextos.

 

Que te hacen vivir otras vidas, alejarte de la realidad y sentir la adrenalina como si estuvieras ahí, tratando de ayudar al personaje principal a resolver esa trama, saliendo ileso de todos esos efectos especiales que, si bien sabes que en el fondo son producto de la tecnología, los sientes tan reales que te conmueven hasta acelerar tu pulso o romper en llanto ante una gran escena.

 

Así son las buenas películas, las que hacen que valga cada peso que pagaste en la taquilla, cada minuto de espera para verla en cartelera.

 

Ahora te pregunto: ¿Alguna vez te has imaginado ser creador de una película de esas? ¿De esas que pueda ganar los mejores premios y no sólo eso, sino que tú seas el protagonista?

 

Que pudieras representar cualquier papel, de esos que te inspiran a ser como ellos: fuertes, inteligentes, astutos, los líderes de grupo, los simpáticos y salir de entre las llamas; con algunas heridas pero con una sonrisa por haberlo logrado, o aquellos que apoyan al protagonista, la chica simpática, o la que no, el divertido o el que sólo propone las ideas para que el resto las haga…

 

Hoy, que la realidad supera la ficción, ¿Te has puesto a pensar que no sólo puedes darle vida a una película, sino que tienes el poder de rediseñar y dirigir una nueva era?

 

Después de esto, nuestros hábitos y actividades nunca volverán a ser las mismas.

 

Hemos roto el capullo donde estábamos para salir de nuestra zona de confort, hemos descubierto que somos capaces de crear cosas desde la nada; y hoy tenemos la gran oportunidad de elegir las características que le pondremos a los seres humanos que saldrán a tomar el rumbo del mundo en unas semanas y a las generaciones que nos sucederán por las próximas décadas.

 

Qué fortuna, qué enorme oportunidad, que al igual que en una nueva trama, podamos elegir cómo será la nueva generación de hombres y mujeres que vivirán el lugar que hoy habitamos; de marcar cómo será la economía a partir de hoy, cómo utilizaremos nuestro tiempo, cómo aprovecharemos nuestras habilidades en las redes sociales para generar dinero, cuáles serán nuestras prioridades y qué de lo que hoy tenemos, queremos llevar a nuestra nueva vida.

 

A lo largo de la historia han existido momentos que nos han enseñado a hacer las cosas diferentes para evolucionar, y aunque en ocasiones los cambios son más rápidos que nuestro nivel de adaptación, tarde o temprano terminamos dominando el escenario para sacar provecho de todo lo que se nos presenta.

 

Pasaremos a la historia como la generación que está siendo testigo de cómo reaprenderemos a vivir, a interactuar, seremos quiénes marcaremos las líneas de esta nueva trama, para que esta vez ¡todos ganemos!

 

¿Lo habías visto así?

 

Pues entonces, ¿Qué esperamos para echar a volar la imaginación?

 

Al escribir no un guion, “El guion”, vayamos haciendo un casting inteligente; siempre será un gran logro integrar el mejor reparto para que esta vez, contemos la mejor historia, ¡NUESTRA HISTORIA!

 

Pero haciéndolo debemos considerar todos los papeles, recordando que para que los grandes rodajes se logren, necesitamos de un enorme universo donde, desde quienes idean la trama, la dirigen, los que montan el escenario, el vestuario, el staff de ingeniería, quienes cargan, descargan e incluso quienes limpian cada espacio y al término de la edición; los que la promocionan, la distribuyen, quienes hacen las palomitas y finalmente, aquella persona que invita a alguien más con mucho esfuerzo y emoción a verla! (por mencionar a algunos).

 

¿Ves? ¿Cómo cada uno podemos generar tanto? Es momento de hacer selección de lo que queremos mostrar, una historia de ficción, una romántica, de comedia o ¡una de terror que no tenga taquilla!

 

Los años pasarán, y cuando hables con tus hijos, o los hijos de tus hijos, podrás contarles que tú tuviste la oportunidad de replantear el mundo en el que ellos vivirán. ¿Quieres que te lo agradezcan? o ¿Que te reprochen porque no diste tu mayor esfuerzo para cambiar el rumbo, no sólo de tu vida o de tu familia, sino de toda una generación?

 

Hagamos que valga la pena lo que todos estamos viviendo ahora, para que no repitamos al término de esta etapa todo aquello de lo que nos hemos quejado; todo aquello que nos ha limitado, todo aquello que nos afecta de forma colectiva y que nos orilló a vivir lo que hoy nos ha puesto en jaque.

 

Hagámonos conscientes que hoy más que nunca, nuestros actos impactan a los demás, entonces, hagamos bien las cosas, para que digamos con orgullo, somos los creadores de un nuevo guion y con ello, de nuevos y grandiosos capítulos donde nuestra vida, merezca ser  vista una tarde lluviosa, frente a una chimenea, con el mayor combo de palomitas y recordada en una alfombra roja, por cualquiera que sea nuestro personaje.

 

A echar a volar la imaginación para trabajar en ello y merecerlo. Porque todos somos… ¡UNIVERPRESARIOS!

 

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