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Martes, 23 Junio 2020 02:47

Para el que no sabe a dónde va, ¡cualquier camino es bueno!

Para el que no sabe a dónde va, ¡cualquier camino es bueno! Escrito Por :   Anabel García Morales

La nueva economía exige mayor planeación, orden y profesionalización. Si bien es cierto que durante estos últimos meses los emprendedores y empresarios, hemos tenido que sobrevivir con una seria de estrategias al vapor, ante la dinámica de cada semana; también es importante darnos cuenta, de que gran parte de las adversidades que hemos sorteado pudieron resolverse de otra forma si hubiéramos tenido un plan B.


 

Por ello, es sumamente importante que aprendamos de las experiencias vividas y visualicemos nuevos escenarios para que nuestro negocio, empresa o emprendimiento, (si apenas vamos a comenzar) tengan mayores posibilidades de éxito.

 

Para cualquiera que sea tu giro económico, debes considerar reorganizar las principales áreas para que, la próxima mitad del año, sea más alentadora y puedas cerrar el 2020 con números a favor o por lo menos, sin rezago en tus inventarios o sin tantas deudas.

 

Primero debes partir por analizar dónde estás parado.

 

No necesitas ser un master en finanzas o en negocios, para hacer un balance de tus ventas y comparar esos números del primer semestre con respecto a los del año anterior; si no lo tienes, es momento de darte cuenta que el registro de todas tus ventas te ayudará a analizar mejor a tus clientes y así, buscar nuevas formas para acercarte a ellos.

 

Revisa tus inventarios, en éstos días seguro has acumulado más producto y es hora de moverlo. Si tienes mercancía por caducar, de fin de temporada o que representa un porcentaje importante en inversión, asegúrate de planear una campaña de descuentos o promociones para que circule el efectivo y, aún cuando no le ganes lo que tenías presupuestado, es importante que no se convierta en merma; sácalo.

 

Evalúa tus prioridades, recuerda que antes de lo material lo más valioso para cualquier empresa es su factor humano; por ello, incentiva a tu gente para que se conviertan en tus mejores promotores, incluso si no son del área de ventas, estimúlalos para que a través de sus propios contactos y redes personales, puedan promover la comercialización de tu producto o servicio, la unión hace la fuerza.

 

Reduce tus gastos. Seguramente esto lo has hecho desde el principio, pero si aún puedes ajustar tus egresos a modo que no te veas tan apretado, hazlo. Habla con proveedores y, con base en proyecciones, arma un esquema de pagos para que te resurtan sin que tengas que descapitalizarte tanto.

 

Haz manuales. Hoy más que nunca crear procesos nos ayudará a reducir tiempo, dinero y esfuerzo y a su vez, mejorar los resultados. Ya nos dimos cuenta que muchas de nuestras nuevas experiencias pueden servirnos para, en un futuro, poder resolver emergencias.

 

Por ello, es importante que lleves un registro de lo que tuviste que hacer para contener las ventas, o cómo fuiste resolviendo en cada área; y asegúrate de contextualizar con datos como: tiempo, condiciones, estado emocional de las personas, y todos los detalles que te puedan enriquecer esos datos; para saber cómo actuaste en cada eventualidad.

 

Enlistando tus cuentas por pagar o tus propias metas de ventas, divide lo que requieres ingresar al negocio en el número de semanas que le quedan al año; para que puedas establecer un tabulador por micro periodos y así planificar estrategias para cada uno.

 

Si eres un pequeño negocio, es hora de que pienses que si empiezas a hacer las cosas con orden, podrás resistir mejor alguna eventualidad y no te mantendrás a la expectativa de los cambios diarios.

 

Asegúrate de que el dinero que entre por ventas o pago de facturas, no sea utilizado para cubrir cuotas que no correspondan al negocio ni utilices para consumo personal tu propio inventario; de lo contrario será más difícil fortalecerte.

 

Poco a poco iremos retomando nuestro ritmo y, con lo aprendido, resurgiremos aún más fuertes y con mayores oportunidades.

 

Es tiempo de retomar el rumbo, pero ahora hagámoslo mejor; cuidándonos y siendo más conscientes de que nuestros hábitos y disciplina empresarial, pueden ser mucho mejores para hacer frente a lo que pueda suceder.

 

Aprovecha todas las plataformas digitales para promover tus productos y analiza tus indicadores.

 

Las crisis son las mejores oportunidades para crecer, por ello aquí te iremos dando algunas recomendaciones para que fortalezcas tu modelo de negocio, no te desanimes, todo pasará y estará mejor, cuentas con nosotros!

 

Porque todos somos… UNIVERPRESARIOS.

 

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