Inicia la prueba de fuego para el sistema educativo, si bien nadie estaba preparado para todo lo que trajo la pandemia del COVID-19, nuestras políticas públicas en materia de educación, menos.

Pues ya se cumplieron dos años del Triunfo de la 4T; a decir verdad, en el fondo de mi corazón deseaba que nos fuera bien porque al final todos vamos en el mismo barco, pero la realidad, la triste realidad, fue otra.

Levantamos la voz una y otra vez tan fuerte que retumbaran los monumentos, no bastó, después guardamos silencio y bajamos los brazos para hacer sentir la ausencia de las mujeres y ahí estábamos en pie de lucha tratando de visibilizar desde todas nuestras trincheras lo que de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud era desde hace mucho una pandemia: La Violencia de género.

Eran las 5 de la tarde del domingo 5 abril, ahí estábamos todos atentos a lo que el presidente de la república nos diría en su mensaje a la Nación, pasaron los minutos y en el fondo de nuestros corazones emprendedores, aquellos mismos que una vez nos dieron la valentía de salir de la zona de confort, esperábamos que nos voltearan a ver.

De amor no se vive, ni de abrazos y besos como quisiera el Presidente de la República, pero la realidad nos ha rebasado, México entró a la fase 2 y las medidas para evitar que el coronovirus se propague más, se han intensificado, al día de hoy de acuerdo a la Secretaria de Salud 475 casos confirmados y 6 defunciones.