Un menor de edad fue asegurado y golpeado en calles céntricas del municipio de Huauchinango por elementos de Seguridad Pública local, cuando el adolescente acompañaba a su madre comerciante y vendía sus productos como de costumbre, pero nunca se imaginó llevarse una brutal golpiza por parte de los uniformados que no controla el alcalde Gustavo Vargas Cabrera.

El lamentable incidente se registró el sábado 8 de agosto, cerca de las 14:00 horas, en la calle Bravo, en el primer cuadro de la ciudad de Huauchinango, cuando un menor de 14 años de edad acompañaba a su madre a vender sus productos, debido a que se dedican al comercio y es su única fuente de ingresos para sobrevivir.

Se trata de Alan N, de 14 años edad, quien fue golpeado por elementos de la Policía Municipal de Huauchinango, al reclamar una carretilla con aguacates y cacahuates, mismos que su madre vendía cerca de la colonia El Paraíso.

De acuerdo a información proporcionada por el adolescente, señaló que su madre se encontraba vendiendo sus productos, cuando elementos de Seguridad Pública se los decomisaron sin explicarle la razón, por lo que, al incautarle su carretilla y productos, decidió seguirlos en una motocicleta para saber a dónde los llevaban, pero la suerte no estuvo de su lado y terminaron por asegurarlo.

Luego del aseguramiento, los uniformados subieron al menor a una patrulla, lo rociaron con gas pimienta y lo tundieron a golpes en diferentes ocasiones, sólo por el hecho de intentar saber a dónde iba a llegar la carretilla que le habían quitado a su madre.

El menor trató de cubrirse el rostro y la cabeza de los golpes, pues casi perdió la conciencia, “ yo estaba en la motocicleta, no me quería bajar, me esposaron y empezaron a agredirme, por lo que no me dejé y fue ahí donde más de cuatro policías me agredieron y me esposaron, me subieron a la patrulla y me rociaron gas pimienta, me patearon hasta que quisieron; los policías hasta cambiaron de lugar para que todos pasaran a pegarme, hasta una mujer, y únicamente me cubrí del rostro y la cabeza”, señaló Alan.

Por su parte, la madre de Alan manifestó que sólo estaban trabajando y que el alcalde Gustavo Vargas Cabrera no tiene la sensibilidad que tanto alardea en su administración, incluso, dijo que él mismo los manda quitar de la zona del centro y son discriminados.

“Estamos trabajando honradamente, el presidente nos quitó nuestras plazas, nos quitó todo, mientras él come y bebe con su gente, está tragando de nosotros y eso es injusto; ahora con la golpiza que le dieron a mi hijo, pedimos que intervengan Derechos Humanos”, señaló la madre.

Es importante mencionar que, al llegar a los separos de la comandancia, el menor fue intimidado: “me bajaron, me quitaron las esposas y me empezaron a patear, me pidieron mis datos y me sacaron fotos para que me dejaran en libertad; ahora estoy a lo que digan los médicos porque me dejaron la cabeza golpeada y en mi ojo tengo sangre”, precisó Alán.

La madre del menor manifestó que su hijo está expuesto a un derrame cerebral por la fuerte golpiza: “tiene un hematoma en la cabeza, por lo que le tuvieron que sacar una tomografía y está inflamado por dentro, sus ojos están sangrando por dentro, no sabemos qué va a pasar con nosotros. Como madre me duele, es injusto que se hayan metido con mi hijo, se creen muy grandes, hace tiempo también los policías golpearon a un familiar, sabemos qué clase de presidente tenemos; hasta él nos está eliminando día a día, pero los medios se quedan callados”, declaró la madre de Alan.

Hasta el momento, se sabe que la madre del menor ya acudió a las instancias correspondientes, pero será este lunes cuando sea interpuesta la denuncia por el abuso de servidores públicos, asimismo, pedirán que intervenga Derechos Humanos para que no sean discriminados por el hecho de ser comerciantes o personas indígenas; además, pide al alcalde Gustavo Vargas que dé la cara a este problema, que frene los abusos y los cobros excesivos a los comerciantes.