La empresa Fulle Hen a la que el gobierno municipal de Claudia Rivera Vivanco intentó comprarle 12 ventiladores médicos ‘baratija’, resultó ser una empresa ‘fantasma’, pues no existe información relacionada a sus dueños ni cuenta con un domicilio.

De acuerdo con  el acta constitutiva ante el Registro Público de Comercio y en poder de CAMBIO, dicha empresa no cuenta con domicilio establecido, dándose únicamente como referencia el inmueble ubicado en  la Calle 27 B Sur 1394 A dentro del  Fraccionamiento San Isidro Castillotla, el cual es propiedad de Indira Carmen May Rivera, que aparece registrada como una de las propietarias de la empresa.

En un recorrido realizado por CAMBIO, se constató que en dicho domicilio no se encuentra establecida la empresa, siendo únicamente una vivienda sin ningún distingo que haga referencia a Fulle Hen.

Toda vez que se trata de un domicilio particular donde no hay indicios de que sea utilizado como las oficinas de la empresa o como una posible bodega de los insumos con los que trabajan

Asimismo, se señala que la otra dueña de la empresa es una mujer identificada como Laura Karen Pouget Vázquez, sin embargo en ninguno de los dos casos existe un registro acerca de ellas en internet o redes sociales.

Para ello, cada una de las socias aportó un capital correspondiente a 450 mil pesos para poder constituir la empresa, teniendo una inversión inicial de 900 mil pesos para su puesta en marcha.

Sin registros de ella en internet

Inclusive la empresa tampoco cuenta con una página de internet o un número telefónico para contactarla, ni alguna cuenta en redes sociales para solicitar información sobre sus servicios.

Dentro del documento también se establece que Francisco Buenaventura Morales fue designado por las dueñas para que se desempeñara como gerente general de la empresa.

El acta constitutiva también señala que la empresa fue registrada ante el RPC apenas el pasado 12 de noviembre de 2019, bajo la figura de Sociedad Anónima.

Dedicada al sector de la construcción

Pese a que dentro de sus giros laborales se encuentra la comercialización de equipos médicos, medicamentos y material de curación, esta no es la especialidad de Fulle Hen, toda vez que se enfoca principalmente en el ramo de la construcción.

Del mismo modo, se señala que Fulle Hen también tiene dentro de sus actividades comerciales la prestación de asesorías, así como programas de capacitación y  de desarrollo, inclusive participar en investigaciones científicas para el desarrollo tecnológico o investigaciones profesionales, según lo requieran sus clientes.

Fulle Hen fue quien ofreció los ventiladores baratija

De acuerdo con el secretario de Administración del gobierno municipal, Leobardo Rodríguez Juárez, fue la propia empresa la que se acercó al Ayuntamiento para ofrecerles la comercialización de los ventiladores.

Tras la propuesta de Fulle Hen de vender los ventiladores a un costo accesible y con las características técnicas requeridas, se procedió con la revisión de que estuviera constituida formalmente ante un notario y su cumplimiento de las obligaciones fiscales.

El pasado 18 de mayo el gobierno de Claudia Rivera pretendía realizar la donación de 12 ventiladores médicos que adquirió con Fulle Hen a cambio de 15 millones de pesos, sin embargo resultaron ser de segunda mano, por lo que fueron devueltos.

Ante esta situación, la administración municipal aseguró que buscaría la rescisión del contrato, el pago de una fianza de incumplimiento por parte de la empresa, además de devolverle los ventiladores ‘baratija’.