Don Lalo, el viejito que robó el corazón a los poblanos al quedarse sin un ingreso por la crisis del coronavirus, es jubilado de la BUAP y todos los días viaja de Tlaxcala a Puebla para poder vender sus portacredenciales en las instalaciones del CU de la BUAP.

A la edad de 85 años, el señor vende los portacredenciales para sacar unos pesitos y así poder vivir, pero desde que llegó el coronavirus las ventas bajaron debido a que no hay clases en la BUAP.

Ante esto cientos de poblanos ayudaron con despensas, dinero y hasta el portero del Club Puebla, Nicolás Vikoins ayudó a esta noble causa, pero ¿qué sabemos de Don Lalo?

Don Lalo tiene 85 años, trabajó en la BUAP y lo jubilaron con el dinero que le dio la universidad decidió poner un taller para crear portacedenciales.

Así lo narró en entrevista con CAMBIO,  “yo vengo de Ocotlán y fui trabajador de la BUAP, cuando me jubilé, ocupe el dinerito que me dieron y puse un pequeño tallersito para vender mis porta credenciales (…) a pesar de que ahora no hay estudiantes y todo está cerrado, pues sigo viniendo para ver si tengo suerte y se pueda sacar aunque sea algo”.

¿Qué dijo del Coronavirus?

No tiene conocimiento sobre la contingencia sanitaria provocada por el coronavirus, pues comentó que no estaba al tanto de esta enfermedad que ataca principalmente a las personas de la tercera edad, por esta razón Don Lalo ha continuado asistiendo a Ciudad Universitaria desde el 17 de marzo en un horario de 9:30 a 14:30 horas.

“Yo sólo sé que estamos en fase 3 pero no sé de qué sea, hasta apenas me vengo enterando que hay un virus que está matando a las personas como yo, pero no puedo quedarme en mi casa sin salir a vender mis portacredenciales porque de eso vivo (…) ahora muchos me han dicho como ataca este virus y me regalaron cubrebocas y gel antibacterial, me dicen que me cuide mucho para que no me pase nada, yo personalmente le pido a Dios que me siga permitiendo trabajar”.

¿Cuáles fueron sus palabras de agradecimiento?

Ante la gran respuesta de los poblanos que se tocaron el corazón este miércoles para donarle cientos de despensas con varios artículos alimenticios y de limpieza, don Eduardo agradeció profundamente por todo el cariño reflejado, pues esto le sirvió para darse cuenta que si es muy querido y apreciado por toda la comunidad universitaria.

“Todo esto no lo estoy recibiendo con las manos, lo estoy recibiendo con el corazón, agradecido con Dios que de esta manera me demuestran que me tienen en una gran estimación eso es lo que quiero decir, muchas gracias por todo lo que me han apoyado” finalizó.

Los universitarios dicen que es su abuelito

Tras acudir a ciudad universitaria para poder regalarle despensas a don Lalo, decenas de estudiantes y trabajadores de esta casa de estudios, aseguraron que ha sido de vital importancia para todos ellos, considerándolo como un abuelito, ya que ha dado consejos de vida además de vender sus portacredenciales.

“Don Lalo es una persona muy importante en mi vida, me ayudo en una etapa difícil, me dio unos consejos como si fuera mi abuelito y eso me sirvió de soporte para poder enfrentar mis problemas, es un gran ser humano, me escuchó en su momento sin importarle si no era parte de su familia, simplemente se sentó conmigo y me preguntó que me pasaba en esos momentos” aseguró Esmeralda, estudiante de la BUAP.