Al menos 25 reos y un custodio de los Centros de Readaptación Social (Cereso) de Puebla, han dado positivo al COVID-19, siendo el Penal de San Miguel con más casos, los cuales serán trasladados a la zona del Centro de Internamiento Para Adolescentes (CIEPA) que se acondicionará como un Penal COVID o al Penal del municipio de Tecali de Herrera.

Tras dar positivo en las pruebas realizadas por la Secretaría de Salud 16 reos del Cereso de San Miguel, ante esto la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) se negó a confirmar la información, a pesar de que los reos ya fueron aislados en el área de Estancia de Ingreso, la cual ya fue sellada y será desinfectada, además de estar preparando su traslado al penal COVID-19.

De acuerdo a fuentes extraoficiales los casos de contagios, se encuentran estables y no se consideran graves, además que en algunos casos son asintomáticos; pero requieren el aislamiento para prevenir y evitar lo que ocurrió en el penal de Huejotzingo, donde ocho internos ya dieron positivo y uno más se encuentra hospitalizado en el Hospital Regional de Cholula.

Por lo pronto, la Dirección de Centros Penitenciarios ha redoblado las medidas al interior del penal de San Miguel, entregando gel antibacterial, cubrebocas y atomizadores con desinfectante a los internos.

Los primeros casos de COVID-19 en Ceresos

El primer caso de coronavirus dentro de los penales en la entidad poblana fue en el del Cereso de Cholula, ya que el custodio José Alberto Salazar, alias “El Mijares”, murió el pasado 19 de mayo tras presentar síntomas de COVID-19.

Para el 20 de mayo se dio a conocer el caso de un reo infectado en el penal de Huejotzingo, quien desde hace cuatro años está recluido y el pasado 18 de abril fue trasladado al Hospital General del Sur, por un problema de cirrosis y ahora se encuentra internado en terapia intensiva en el Hospital General de Cholula.

Antes esto, el 25 de mayo se confirmó el incremento de reos que han dado positivo al COVID-19 al interior del Cereso distrital de Huejotzingo, siendo ocho más, sin embargo, el número puede aumentar, ya que se encuentran 16 pruebas en proceso.

Por lo que este lunes esos reos iban a ser trasladados para evitar mas contagios, lo que provocó un motín de internos en el Cereso de Huejotzingo, que generó la retención de un custodio, el cual tiempo después fue liberado.

Además, hubo una fuerte concentración de unidades de la policía estatal, Guardia Nacional y el Ejército Mexicano, para evitar un enfrentamiento.

Ante este hecho, el gobernador Miguel Barbosa Huerta, comentó que por un momento hubo inestabilidad al interior del penal de Huejotzingo, porque los internos se enteraron que había compañeros con COVID-19, sin embargo, se logró controlar la situación y fueron los mismos reclusos los que filtraron la información a través de redes sociales.

En la conferencia de prensa matutina, el mandatario estatal mencionó que se provocó una alteración en el orden al interior del centro de reclusión, donde los reclusos fueron llevados al patio del inmueble para resguardarlos, mientras que los reos que dieron positivo a coronavirus fueron aislados en sus celdas, siendo los mismos internos los que comenzaron a enviar videos a través de redes sociales.

Aseguró que para evitar estos hechos, están trabajando para acondicionar de forma inmediata el penal de Tecali de Herrera y el CIEPA, pues se espera que a más tardar el día jueves ya puedan ser atendidos los reclusos que están contagiados de dicho virus.

“Comenzaron a circular videos en redes sociales de internos del reclusorio de Huejotzingo en los que los enfermos de coronavirus pedían apoyo, pues habían sido aislados sin previo aviso, asegurando que no tenían síntomas de la enfermedad”, dijo.

Cabe señalar, que el día de ayer al menos 200 pobladores del municipio de Tecali de Herrera, se manifestaron a las afueras de la presidencia, ante la negativa de que trasladen presos al penal ubicada de dicho municipio.

Luego de que el gobernador Miguel Barbosa Huerta, señalara que trasladarían presos del penal de Huejotzingo a diferentes cárceles poblanas, entre ellas la de Tecali de Herrera, para evitar contagios por COVID-19.