Durante esta cuarentena por el COVID-19, fue creada una cuenta en Instagram para exhibir los múltiples casos de acoso sexual por parte de algunos profesores del Instituto Oriente, a través de “Denuncias Instituto Oriente”, en la cual las poblanas decidieron sacar a la luz estos actos por parte de maestros y hasta alumnos de manera anónima por miedo a represalias.

De las 106 denuncias presentadas hasta el día de hoy, seis pertenecen a las historias más desgarradoras por parte de las alumnas que denuncian acoso y hostigamiento por parte de los profesores, de los cuales algunos siguen dando clases, pues la institución no ha hecho caso a los señalamientos, así lo comentaron las señoritas en la página.

Se ponían borrachos para toquetear a las alumnas

El primer profesor ‘quemado’ por acosador fue Santiago N, quien se ponía a tomar alcohol en reuniones de la escuela para acercarse a las alumnas y abrazarlas tocándoles el pecho, ‘pompas’ y la cintura al grado de hacerlas sentir incómodas, por lo que todas huían de él en este tipo de fiestas.

El siguiente caso es del profesor Julián N de formación Ignaciana (o religiosa), quien les tomaba fotografías a las estudiantes sin su consentimiento, además de hostigarlas y correr rumores perjudicando la imagen de las alumnas y reprobándolas si no le hacían caso.

De igual forma, este maestro fue denunciado nuevamente por buscar a las alumnas con cualquier excusa para sacarlas del salón, acariciándoles el cuello, espalda y preguntándoles si tenía novio.

Al igual, el profesor José Antonio N les mandaba mensajes inapropiados a las estudiantes como “Me has robado el corazón, contigo me gané el cielo” cuando la alumna únicamente preguntó sobre un examen, además les rozaba de manera ‘accidental’ el pecho de manera evidente y trataba de besar a las jóvenes poniendo su medio labio en la boca.

Un profe es el súper acosador y otro llevaba el kamasutra a las alumnas

El cuarto caso es el profesor Adrián N, quien imparte la materia de español denominándolo como ‘súper acosador’, pues les escribía poemas a las alumnas, entregándoselos cuando pasaban solas por los pasillos de la escuela, además les susurraba cosas al oído.

El quinto caso de acoso sexual se trata del maestro Erick N, donde la joven denunciante señaló que al estar en primero de prepa en el año 2010, el señor llevó un libro de kamasutra y les obligaba a las niñas a verlo para que le contestaran cuál era su pose favorita, y por último que la hicieran.

El sexto y último se trata de una acusación contra el profesor Renán N de Computación, quien acosó a varias niñas, así lo hizo saber la afectada, pues comentó que les tocaba las piernas, ante ello, la mamá de la afectada fue a hablar con el director, pero defendió este acto diciendo que “seguro era un malentendido” y que no le harían nada.

Por último, son alrededor de 105 historias de este tipo contra profesores y alumnos del Instituto Oriente, algunos de ex alumnos, ex profesores y otros, de los que actualmente laboran ahí, pese a ello, en varias ocasiones se mencionó que la escuela a pesar de tener el conocimiento de estos casos contra las estudiantes, no hace nada al respecto y permite que estos acosadores continúen abusando de su autoridad.

El Oriente se defiende ante los señalamientos

Luego de las más de cien denuncias realizadas a esta cuenta de Instagram, el Instituto Oriente se defendió ante los señalamientos e invitó a las señoritas a realizar las denuncias de manera formal para evitar afectar la vida de los acusados.

Desde el domingo pasado que la cuenta “Denuncias Instituto Oriente” fue creada y que hasta el momento se exhibieron 106 casos de acoso sexual, la escuela emitió un comunicado dando su postura ante los hechos.

“El camino de la denuncia pública anónima no nos permite atender adecuadamente la situación (…), sólo se presta para lastimar la vida personal y familiar de personas que no tienen modo alguno de aclaración o defensa y que no permiten acciones serias del colegio en seguimiento a estas denuncias”, argumentó la Institución en el comunicado.

Además, el Instituto Oriente aseguró que al recibir una denuncia, guardan la identidad en el anonimato frente a sus compañeros y sobre todo frente al señalado como responsable de estos actos.

Sin embargo, en los casos narrados dentro de esta cuenta, varias estudiantes argumentaron que la escuela ha sido informada de este tipo de acoso sexual y que inclusive algunos padres de familia fueron a hablar con los directivos, pese a ello no hicieron caso o no tomaron cartas en el asunto ante estas denuncias.