Puebla Pue.- Marco Antonio Rodríguez de 38 años de edad formaba parte del ejército mexicano desde hace 18 años, lamentablemente perdió la vida en un accidente y su familia fue abandonada por el Ejército Mexicano ya que se mencionó que se encontraba bajo los influjos del alcohol al momento del percance, aunque la necropsia señala que murió por un fuerte golpe en la cabeza.
De acuerdo con información de Página Negra, Marco Antonio apenas tenía 15 días en el destacamento de Huejotzingo porque recién había regresado de Guadalajara. Aunque era originario de Santo Tomas Hueyotlipan, vivía con su esposa y sus dos hijas de 15 y 11 años de edad en Amozoc.
A la familia le informaron que Marco Antonio viajaba solo; sin embargo, paramédicos de Huejotzingo brindaron atención médica a dos uniformados e incluso uno de ellos contaba con manchas de sangre en un brazo, después le dijeron que no le pondrían el uniforme porque el accidente se debió a que él manejaba en estado de ebriedad.
Sin embargo, la necropsia reveló que Marco Antonio murió por un fuerte golpe en la cabeza y no se encontró ninguna sustancia en su cuerpo.
Cabe señalar que el cuerpo fue trasladado a Santo Tomas Hueyotlipan para darle sepultura. Hasta ese lugar llegaron dos compañeros de Marco Antonio y un capitán, quien prometió despedir a Marco Antonio con los honores que se merecía.
De acuerdo con lo publicado en Página Negra mencionan que el único apoyo que recibieron provino de una colecta realizada por sus compañeros, quienes juntaron 9 mil pesos para poder comprar el féretro.
“Llegaron unos compañeros y un capitán dijo que sí le iban a hacer honores y al final que no porque estaba tomado (…) al Ejército lo respetamos, es una institución con valores y que ahorita hagan esto. Decían que iba solo, ¿y las armas que aparecieron? Todo está en las redes, no estamos mintiendo. Dio 18 años de servicio y ni un adiós le dieron”.
Carlos Rodríguez
@Diario_Cambio