A pesar de que durante los meses de confinamiento riguroso muchos poblanos solicitaban comida a domicilio, la realidad es que los ingresos de los repartidores de las plataformas de DiDi Food y Uber Eats se desplomaron a la mitad, pues hasta antes de la pandemia ganaban cerca de 3 mil pesos a la semana y ahora apenas y pueden lograr mil 500 pesos.
Ernesto N y Brian N, quienes prefirieron permanecer en el anonimato por miedo a ser “desconectados por las Apps” señalaron que lo más complicado de trabajar como repartidor durante la pandemia se vivió al inicio, ya que los restaurantes estaban cerrados. Si bien con el paso del tiempo esto fue mejorando, aún no llegan a la cantidad de viajes que se realizaban antes del COVID.
Esta situación preocupa a los dos jóvenes poblanos, ya que Brian es el sustento de su casa y con su bicicleta intenta llevar a casa diariamente lo necesario para vivir. Mientras que Ernesto utiliza su motocicleta para sacar algo de provecho entre clases, ya que trabaja para sacar adelante sus estudios universitarios.
Otras de las situaciones que les ha tocado vivir es que la gente no toma las medidas sanitarias apropiadas, pues en más de una ocasión el cliente salió a recibir su pedido sin el uso de cubrebocas. Esto les preocupa, ya que no quieren llevar la enfermedad a sus hogares, por lo que pidieron a los consumidores que sean conscientes de la situación que se vive.
Ellos mencionan que extreman precauciones, pues además de las recomendaciones del gobierno estatal, ellos insisten en rociarse desinfectante cada que dejan un pedido, así como los paquetes que van a entregar y a pesar de andar en sus vehículos utilizan el cubrebocas.
A nivel nacional, los repartidores de estas plataformas se han duplicado, aunque nunca se ha transparentado la cantidad de repartidores que hay en cada estado, siendo esta otra de las causas por las que la remuneración de los conductores de las aplicaciones de delivery bajaron con la pandemia.
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José Alberto Pérez
@Josealberto_5