Hace unas semanas afirmé que el domingo 10 de abril inició la segunda etapa de gobierno de AMLO, una semana después, en la cámara de diputados la reforma más importante para el Presidente no consiguió los votos suficientes para ser aprobada, a continuación, el país se colocó entre dos narrativas, la de la oposición y su pequeña y única victoria, y la del gobierno, acusándolos de traidores a la patria.
Ambos afirmaron que no apoyarán ninguna iniciativa de su contraparte, es decir, anunciaron estridentemente: una parálisis legislativa; y para cerrar, el jueves 28 de abril se presentó la iniciativa de Reforma Electoral en la Cámara de Diputados. Abril de 2022 fue el mes que delineará el resto del sexenio.
Entre las propuestas que algunas me emocionan y otras no alcanzo a entender, sino hasta que se discutan los pormenores en las comisiones y pleno, expondré algunos puntos relevantes:
1) Desaparición de la jurisdicción local en materia electoral: la fragmentación de la jurisdicción electoral ha provocado que sea fácilmente cooptada por el titular del Poder Ejecutivo, y más que garantizar imparcialidad o efectividad, garantizan fraudes electorales ¿se acuerdan de la elección en Puebla en 2018?
2) Financiar a los partidos sólo en temporada de elecciones: las dirigencias partidistas son altamente demandadas por su capacidad de decisión, designación y gasto, sin embargo, se ha visto que en lugar de pensar en la formación de la militancia o en estrategias de posicionamiento electoral, el presupuesto del partido se usa para sandeces, veamos el caso de Augusta Díaz de Rivera y la compra de una camioneta de más de 600 mil pesos.
3) Implementar el voto electrónico: las herramientas tecnológicas deben ser incorporadas en nuestra democracia, Giovanni Sartori ya anunciaba esta posibilidad e incluso afirmaba que podían facilitar la democracia directa.
4) Reducción de tiempos en radio y televisión: cuando en 1994 Ernesto Zedillo reconoció la disparidad en los medios de comunicación, se implementaron diversas reformas que gradualmente llevaron a que los partidos, más que construir un programa de gobierno, se concentran en contratar agencias de marketing que poco ayudan a la hora de gobernar.
5) Reducción a 33 por ciento la participación ciudadana para que la revocación de mandato sea vinculante: la democracia directa llegó para quedarse y como hemos insistido en diversos espacios, estos mecanismos deben perfeccionarse.
6) Reducir las restricciones de comunicación gubernamental durante la veda electoral: bien dice el gobernador, la veda electoral es larguísima y muy restrictiva, aclarar supuestos de comunicación gubernamental es reconocer nuestro derecho a la información.
7) Creación de la legislación única en materia electoral: el caos en materia electoral se explica en parte por la diversidad de sus leyes, hay quienes aún escriben TRIFE o Cofipe, instituciones noventeras, que sólo quedan en el recuerdo.
Y los más polémicos, guardaré la oportunidad para explayarme sobre ellos:
1) Creación del Instituto Nacional de Elecciones y Consultas (INEC).
2) Elección popular de consejeros y magistrados electorales propuestos por los poderes de la unión.
3) Reducción de las y los representantes en el Congreso de la Unión (300 diputados - 96 senadurías) y miembros de los ayuntamientos (como máximo nueve regidores proporcionales).
4) Cambiar el modelo de elección nacional, hacia el “Sistema de representación pura”.
Todo lo anterior, además debe analizarse con criterio 2024. Es decir, hay que estar atentos a los transitorios para saber cuándo se empezarán a aplicar estas nuevas disposiciones y si eso afectará las aspiraciones de unos o de otros.
Ángel Custodio: En la reunión con diputados federales de Morena y partidos en coalición llovieron flores y coscorrones, fiel a su estilo, el presidente bromeó con ‘Nacho’ Mier y reconoció la labor de Adán Augusto, esto provocó que el círculo rojo se llenará de suposiciones y que se convocarán a interpretar las señales, los gestos, las palabras; no cabe duda, la sucesión presidencial es la actividad más perversa y atractiva de la política mexicana.
