La rectora de la BUAP, Lilia Cedillo Ramírez reconoció el trabajo realizado por Sergio Salomón Céspedes Peregrina a favor de la universidad, destacando el apoyo brindado por el gobernador del estado para la construcción de Ciudad Universitaria 2 (CU2) asegurando que fue clave para concretar este proyecto.
Lo anterior, durante la entrega de la Medalla ‘Melchor de Covarrubias’ a la Filantropía Académica a Sergio Salomón Céspedes Peregrina, por parte del Consejo Universitario de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).
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Durante la sesión de este órgano universitario, la rectora de la BUAP propuso entregar la Medalla ‘Melchor de Covarrubias’ por la labor realizada por el gobernador Sergio Salomón Céspedes con la institución, destacando la creación de Ciudad Universitaria 2.
“Como parte de las labores que realizó el gobernador, fue la iniciativa a la Ley de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla en el Congreso del Estado, una ley que tiene como objetivo asegurar la autonomía universitaria” expresó Cedillo Ramírez.
Lilia Cedillo señaló que la intervención del gobernador Sergio Salomón Céspedes fue clave para la recuperación de 90 millones de pesos por el conflicto con el club Lobos BUAP, dicho recurso sirvió para el equipamiento del Centro de Simulación ‘Matilde Montoya’.
También la rectora, agradeció al gobernador el acompañamiento y el apoyo para la creación de Ciudad Universitaria 2, la cual le cambiará la vida a más de 30 mil jóvenes en el futuro cercano, comentó que fueron múltiples obstáculos como trámites, cumplimiento de normas, antes de comenzar la construcción, que no hubiera sido posible realizar sin el aporte del gobierno del Estado.
“En esta sesión del Consejo Universitario, los consejeros han hablado de la importancia que ha tenido la labor que el gobernador ha hecho en nuestro estado, pero sobre todo en nuestra institución” comentó Lilia Cedillo.
Finalmente, aseguró la rectora de la BUAP, que más de 150 mil jóvenes quienes no podrían ingresar a la universidad, y que los padres de familia no contaban con los recursos para enviarlos a escuelas privadas, la Máxima Casa de Estudios realizó trabajo en equipo junto con el gobierno estatal para construir un segundo recinto de Ciudad Universitaria, lo que permitió ampliar la matrícula.
