Sin duda, la comida no sólo alimenta el cuerpo, también el alma y los platillos de Puebla son un ejemplo de ello, con tanta historia y tradición detrás; sin embargo, hay algunos que pueden resultar extraños y exóticos, incluso para los paladares más experimentados.
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– Balut: un huevo de pato fertilizado que se cocina y se come con todo y embrión, considerado un manjar en Filipinas, Vietnam y Camboya.
– Kopi Luwak: el café más caro del mundo, hecho de granos que se extraen de las heces de las civetas, con un sabor dulce y afrutado.
– Tarántulas fritas: un snack habitual en Camboya, condimentado con ajo y hierbas.
– Fugu: un pez japonés que contiene un veneno mortal, solo preparado por chefs especializados, lo que lo hace un platillo exótico.
– Sannakji: pulpo coreano cortado vivo y sazonado, con tentáculos que siguen retorciéndose.
– Gusanos: larvas de mariposa que se alojan en las hojas y raíces del maguey, considerados una delicia en Tailandia.
– Lagartija frita: un plato tailandés que se come frita o asada.
– Chapulines: saltamontes fritos, considerados una delicia en México y Tailandia.
– Gusano Mopane: un gusano considerado una fuente de proteína en Zambia, cocinado con diferentes especias.
– Buchada: un platillo brasileño hecho con el estómago de una cabra, relleno con el corazón, intestino, hígado, pulmones y demás vísceras.
¿Qué platillo te atreverías a comer?
Este contenido no fue generado automáticamente; fue creado con la asistencia de inteligencia artificial. Sin embargo, un periodista revisó la información antes de publicar este material para asegurar la calidad de la nota periodística.
