Frente Poblano realizó lectura del Pliego, en el permitirán que mujeres expongan su testimonios de casos de violencia de manera voluntaria.
Después de una hora, contingentes encabezados por el Frente Poblano arribaron a las instalaciones del Congreso del Estado, en donde llevaron a cabo la lectura del Pliego.
Sin embargo, hubo cambio de planes, pues el pase se lista que se tenía planeado en ese mismo lugar, se movió al Zócalo.
Al filo de las 16:20 horas, grupos de familiares de víctimas de feminicidio, madres e infancias, mujeres con silla de ruedas arribaron al Congreso del Estado.
Quienes escucharon sentadas con sus respectivos carteles.
La permanencia de los contingentes a las afueras de las instalaciones duró poco menos de 10 minutos, pues en breve, se trasladaron al Zócalo de la capital.
En donde abrirán el micrófono para exponer de manera voluntaria sus casos.
Es importante mencionar que, aunque el pase de lista de mujeres víctimas de feminicidios se planeó que sería en el Congreso, se llevará a cabo en el Zócalo.
Así como las experiencias narradas por ellas.
Testimonios de mujeres víctimas de violencia
Mujeres que participaron en las movilizaciones del 8 de Marzo relataron los episodios de violencia que han sufrido de parte de sus agresores.
Este viernes salieron a marchar para pedir justicia, solidaridad a las víctimas y políticas a las autoridades para prevenir agresiones.
También cuestionaron la labor de la Fiscalía de Puebla por la lentitud u omisión a las denuncias que han presentado.
Una menor de edad de manera anónima denunció que su tío la violó. El martes habrá audiencia y pide a las autoridades se aplique todo el peso de la ley.
Ruth también víctima de la violencia sexual. Su primo abusó de ella cuando tenía 7 años y no procedió la denuncia porque las autoridades declararon que resultó ser extemporal.
Ingrid señaló que la principal violencia es el acoso callejero, solo por la forma de vestirse.
Jes declaró que también hay violencia solo por la apariencia física.
Una mujer de manera anónima denunció el acoso estudiantil y después laboral en una universidad de la que prefirió reservar el nombre.