Este miércoles comenzó a operar el nuevo rastro municipal de Tehuacán, diseñado para procesar carne de res y cerdo; sin embargo, el inicio se vio empañada por problemas operativos que afectaron el trabajo de más de cien tablajeros locales.
Los trabajadores del sector expresaron su preocupación al llevarse las reses de las nuevas instalaciones
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Argumentando que el equipo y materiales disponibles no cumplen con los estándares necesarios para realizar el sacrificio de manera eficiente.
En particular, se identificaron deficiencias en el área de sacrificio de reses, que llevaron a la necesidad de sustituir herramientas como rieles y polipastos.
Además, se tiene que corregir el cajón de sacrificio, puesto que con estas deficiencias no existen condiciones para trabajar
Puesto que hay riesgo un gran riesgo para los trabajadores, ya que se aseguran que se inclusive se les podría caer alguna res encima.
Por lo anterior, aseguraron que el rastro antiguo, pese a que también está en mal estado, se encuentra en mejores condiciones que el actual.
De modo que solo se lograron sacrificar tres reces debido a estas complicaciones, lo que ha ralentizado significativamente el proceso.
Ante esta situación, se decidió trasladar temporalmente los animales al antiguo rastro municipal mientras se realizan las correcciones necesarias en el nuevo inmueble.
Se estima que la entrega oficial se lleve a cabo en un plazo de dos a tres semanas, con la posible presencia del gobernador del estado en el evento.
Mientras tanto, se trabaja para solucionar los problemas y asegurar el funcionamiento adecuado de las instalaciones.
