Automovilistas y transportistas denuncian ser víctimas de actos de corrupción por parte de agentes de tránsito del municipio de Huejotzingo, quienes presuntamente los extorsionan con montos que van desde los 500 pesos a los 4 mil pesos para dejarlos pasar por la demarcación, aunque sean tramos carreteros federales.
Por medio de redes sociales, los ciudadanos han publicado sus denuncias en donde muestran el modo de operar de los elementos de tránsito municipal de Huejotzingo, quienes detienen a los conductores con cualquier “pretexto”.
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De acuerdo con las denuncias, los agentes solicitan documentación como licencia de conducir, tarjeta de circulación, o documentos de unidades de carga, entre otros.
Si los oficiales se percatan de falta de documentos, en consecuencia, inician amedrentamientos a los transportistas, amenazándolos con llevarse la unidad al corralón o solicitando una cantidad de dinero con la finalidad de evitar la infracción y que sigan su camino.
A pesar de ser tramos federales, los automovilistas y transportistas han señalado a los elementos de tránsito municipal de Huejotzingo de realizar extorsiones económicas que van desde los 500 pesos hasta los 3 mil pesos.
En entrevista con DIARIO CAMBIO, un comerciante que acude al tianguis de Huejotzingo, el cual se instala cada sábado, denunció haber sido víctima de las extorsiones de los agentes de tránsito, pues en primera instancia fue detenido al no portar el cinturón de seguridad y de inmediato le solicitaron dinero a cambio de que su unidad no fuera remitida al corralón.
“Le comenté al oficial que me acababa de subir y arranque mi camioneta. Le entregué la licencia y la tarjeta de circulación que me solicitó, pero aun así me señaló que la multa superaba los 3 mil pesos. Sin embargo, me dijo que había una forma de arreglarnos, y al final, el no portar el cinturón de seguridad me costó 1 mil 500 pesos”, comentó.
Por su parte, un vecino del municipio señaló a DIARIO CAMBIO, que estas prácticas por parte de los elementos de tránsito, que son exhibidas en redes sociales, podrían afectar el turismo, así como a las personas que utilizan estas vías de comunicación como paso.
