Este lunes 30 de septiembre fue el último día de la presidencia de Andrés Manuel López Obrador. Comenzó con la mañanera número mil 438, que estuvo colmada de nostalgia pero también de satisfacción por parte del mandatario ante lo que presumió como los logros de su sexenio.
López Obrador acudió al último de sus encuentros cotidianos con la prensa y en esta ocasión presentó cifras de cierre: 125 mil millones de pesos de inversión pública en el campo; 47.63 por ciento de crecimiento en el Índice de Confianza al Consumidor.
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Mencionó los 11 lugares que México subió en el ranking mundial de felicidad: hoy es lugar 25 mundial y segundo de Latinoamérica. Destacó la confianza de 60 por ciento en la presidencia, secretarías de Estado y Fuerzas Armadas; y 2 millones 409 mil de nuevos empleos formales.
También firmó los decretos de la reforma a la Guardia Nacional (GN) y los pueblos indígenas; agradeció tanto a diputados como a senadores por haberlas sacado adelante.
AMLO afirmó que se va de la presidencia muy satisfecho: “Me dediqué a servirle al pueblo”, dijo y refirió que siempre se guió por el lema “primero los pobres”. En su última ‘mañanera’ no pudo evitar que los ojos se le humedecieran cuando su equipo de trabajo lo sorprendió con una canción y un video recopilatorio de su lucha a lo largo de 18 años.
También dijo que se marcha del cargo tranquilo, porque “entregaré la banda presidencial a una mujer excepcional, a una humanista, una mujer llena de amor, humildad y buenos sentimientos”, señaló.
Más tarde, aún como jefe del Estado mexicano, López Obrador tuvo un encuentro con jefes de estado de América latina que acudirán a la toma de posesión de Claudia Sheinbaum Pardo: la presidenta de Honduras, Xiomara Castro; el primer ministro de Belice, John Briceño; los presidentes de Colombia, Gustavo Petro; de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez; de Chile, Gabriel Boric Font y de Guatemala, César Bernardo Arévalo de León.
“Me despedí de ellos agradeciéndoles por sus muestras de apoyo y solidaridad con México, su pueblo y su gobierno. Abrazos de hermanas y hermanos a todos”, comentó el aún presidente.
A las 17:40 de la lluviosa tarde en la Ciudad de México, Andrés Manuel López Obrador abandonó para siempre Palacio Nacional; los aposentos que durante los últimos 6 años fueron su hogar. A las 18:30 llegó a su departamento en Tlalpan, del que saldrá para acudir a la ceremonia oficial en que Claudia Sheinbaum se convertirá en la primera presidenta de México.
