En una camioneta tipo van y escoltado por tres patrullas de la Guardia Nacional, el exgobernador Mario Marín regresó a Puebla y continuará en arraigo domiciliario su proceso por el presunto delito de tortura contra la periodista Lydia Cacho.
🚨Logra Marín salir del Altiplano: así llegó por la madrugada a su casa en Xilotzingo#diariocambio pic.twitter.com/HMC7kTYpYp
— Diario Cambio (@Diario_Cambio) August 14, 2024
A las 4:00 horas de este miércoles 14 de agosto, el ex mandatario del PRI arribó a su domicilio ubicado en San José Xilotzingo en la capital poblana. En la prisión estuvo casi tres años y medio.
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El sábado 10 de agosto, la jueza Angélica Ortuño Suárez ordenó su liberación inmediata. Tras obtener un cambio de medida cautelar, que lo tenía en prisión preventiva en el penal del El Antiplano en México.
Otras de las medidas cautelares para el proceso legal en libertad de Mario Marín son la garantía económica de 100 mil pesos. Así como la prohibición de salir del país, dejando su pasaporte y visa bajo resguardo de las autoridades. Además, se emitirá una alerta migratoria.
El acusado tiene prohibido comunicarse con las víctimas, testigos e imputados implicados en el proceso legal contra la también escritora Lydia Cacho.
Mario Marín debe permanecer bajo resguardo domiciliario en su casa, ubicada en la capital poblana. Portando en todo momento un brazalete electrónico para ser ubicado en tiempo real.
A partir de este día, el priísta debe notificar a la empresa que estará a cargo de este dispositivo electrónico, para el seguimiento de la unidad de supervisión de medidas cautelares.
En febrero de 2021, agentes de la Fiscalía General de México (FGR) detuvieron a Mario Marín en un domicilio en Acapulco, Guerrero y tras varios amparos, logró conseguir su proceso en libertad. Aún está pendiente la sentencia del juicio.