El gobierno de Estados Unidos reconoció la exitosa conclusión del caso laboral contra Volkswagen de México, tras la implementación de las medidas correctivas exigidas por el Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida del T-MEC. El caso surgió a raíz de acusaciones de ocho trabajadores que alegaron violaciones a sus derechos sindicales en abril pasado.
El conflicto comenzó cuando ocho trabajadores fueron despedidos en abril por participar en actividades sindicales. Esta denuncia llegó a la Representación Comercial de Estados Unidos (USTR), lo que provocó una intervención formal del gobierno estadounidense en julio a través de la Secretaría de Economía de México.
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Se estableció el 9 de agosto de 2024 como fecha límite para resolver el caso, y se logró una resolución exitosa. Las acciones correctivas incluyeron la reinstalación de los ocho trabajadores en sus puestos originales, manteniendo las mismas condiciones laborales y prestaciones que tenían antes del despido. Además, se les compensó retroactivamente por salarios y prestaciones pendientes, y uno de los trabajadores recibió una indemnización acordada durante las mesas de diálogo.
Como parte de las medidas, se implementó una carta de neutralidad que garantiza a los trabajadores el derecho a la libre asociación sindical y a la negociación colectiva. También se capacitó al personal de Volkswagen en estos principios y se estableció un mecanismo confidencial para denunciar violaciones laborales sin temor a represalias.
La Embajadora Katherine Tai de Estados Unidos elogió estos esfuerzos y destacó la colaboración entre ambos países para fortalecer las protecciones laborales y asegurar los derechos fundamentales de los trabajadores.
Con la resolución satisfactoria del caso, el gobierno de Estados Unidos levantó las restricciones sobre las exportaciones de Volkswagen de México, permitiendo la liberación y liquidación de mercancías con destino a EE.UU.
