El INAH nunca dio permiso para que Museos Puebla colocara chips a piezas museísticas durante la administración de Miguel Barbosa, y al no tener una solicitud se pidió retirar y realizar un catálogo del patrimonio, así lo dio a conocer Anel Nochebuena.
En entrevista, Nochebuena Escobar dio a conocer que el instituto nunca otorgó autorización para la colocación de estos dispositivos y que, por el contrario, recomendó su retiro inmediato para evitar más daños al patrimonio cultural del estado.
➡️ Únete a nuestro canal de WhatsApp para mantenerte informado al estilo de DIARIO CAMBIO
“Lo que yo hice fue preguntar por oficio al INAH y la respuesta fue clara: ‘Dejen de poner los chips, nunca pidieron permiso para hacer ese procedimiento’, y se recomienda que se retiren en un ejercicio de cuidado del patrimonio”.
La instalación de los chips fue impulsada por el entonces gobernador Miguel Barbosa y su secretario de Cultura, Sergio Vergara Berdejo, como una medida para controlar y contabilizar las piezas del acervo artístico y documental de Puebla.
La colocación de estos chips, que son pequeñas placas metálicas similares a las usadas en productos comerciales, causó daños a algunas piezas de los 21 museos estatales, aunque aún se desconoce la magnitud exacta.
Ante esto, Anel Nochebuena aseguró que el proceso de retiro será largo y se extenderá más allá de su administración.
Ante esta situación, el Instituto Nacional de Antropología e Historia solicitó un cambio en la forma de gestionar el acervo estatal, y optó por la creación de un catálogo digital de todas las piezas.
Este catálogo estará disponible para su consulta pública en un sitio web que se lanzará en noviembre y contendrá información detallada sobre las casi 140 mil piezas que conforman el patrimonio de los museos de Puebla.
“Lo que hemos hecho es catalogar museo por museo, pieza por pieza, fotografiar cada una y pasarla a manos de restauradores para que evalúen su estado”.
Cabe recordar que, la instalación de chips data de junio de 2021, cuando una auditoría de la Secretaría de la Función Pública reveló la existencia de 132 mil 780 piezas en los museos estatales, de las cuales 5 mil 981 estaban catalogadas como “faltantes”. Además, se descubrieron otras 32 mil 473 piezas que no formaban parte del inventario oficial.
Ante esta irregularidad, el entonces gobierno de Miguel Barbosa decidió implementar el sistema de chips, buscando mayor control sobre las piezas, pero sin la autorización necesaria del INAH.
“La idea era contabilizar todo el acervo, pero el uso de estos chips fue inadecuado y dañino para las piezas”.
Por lo que, ahora, se está trabajando de la mano con el INAH federal y estatal, así como con la Secretaría de Cultura, para corregir los errores y proteger el patrimonio cultural de manera adecuada.