Tras la clausura de la planta de cementos Cruz Azul por el Ayuntamiento de Tecamachalco, el secretario de Gobernación, Javier Aquino Limón, sostuvo una mesa de trabajo con integrantes de dicha empresa y tres alcaldes de la zona, con el objetivo de generar vínculos y acuerdos para dar solución a las demandas de ambas partes.
Acompañado del titular de la Consejería Jurídica, Jonathan Ávalos, Aquino Limón dialogó con los alcaldes de Tecamachalco, Alfonso Cid Machorro, y de Palmar de Bravo, Adán Silva Valeriano, con quienes de manera unánime acordaron establecer una mesa de trabajo con la Consejería Jurídica, donde se abordarán y analizarán los argumentos de cada instancia y promover un acuerdo en el marco de la ley con respeto a la autonomía de los ayuntamientos.
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De acuerdo con el Ayuntamiento de Tecamachalco, las obras de la planta cementera fueron suspendidas porque carecen de permisos municipales para operar.
Además, se encuentran invadiendo 598 hectáreas del territorio de dicho municipio, Quecholac y Palmar de Bravo.
Denuncias de campesinos vs la cementera ante la escasez del agua
Es importante mencionar que la planta cementera Cruz Azul ha recibido múltiples denuncias de parte de campesinos de la zona de Tecamachalco, Palmar de Bravo y Quecholac, por daños a cultivos y al desbasto de agua, así como por el despojo de tierras.
A través de la organización EcoTuzuapan, los campesinos y activistas han presentado sus quejas por las actividades de la cementera Cruz Azul, que a consecuencia están afectando la Reserva de la Biósfera de Tehuacán–Cuicatlán, según sus denuncias.
