Agustín Guerrero Castillo, secretario general del Comité Ejecutivo Estatal (CEE) de Morena arremetió contra el dirigente estatal del PRI, Néstor Camarillo. Lo tachó de extorsionador y de vender de candidaturas. Esto, luego de la filtración de un audio en donde Paola Angon menciona que le dio 2.5 millones de pesos para poder ir en busca de la reelección.
Guerrero Castillo indicó que no les sorprende que Néstor Camarillo sea señalado de extorsionar y pedir dinero a cambio de las candidaturas en el tricolor. Aseguró que el presidente del PRI en Puebla incluso cobró a todos los aspirantes a un cargo de elección popular para poder realizar sus procesos de registro.
“Allá este señor sin ninguna base estatutaria les cobro para registrarse y ser capacitados, entre comillas. Y ese dinero en dónde está, en dónde se lo reportó, para qué es. Porque todo ingreso que tienen los partidos, se tiene que reportar al INE. No se puede cobrar a la militancia y clavarse esa lana”, acusó.
Además, señaló que Camarillo también habría exigido pagos adicionales por supuestos cursos de capacitación, lo que consideró una práctica abusiva.
“Puso una cuota de recuperación, entre comillas, para que aquellos personajes del PRI que aspiraban a una candidatura. Le pagaran una cuota de registro para participar en el proceso. Luego pagaron por un curso de capacitación también, de 5 mil a 35 mil pesos. Dependiendo el sapo era la pedrada”, mencionó Guerrero Castillo.
Aseguran, en Morena no existen ese tipo de prácticas
En contraste, Agustín Guerrero destacó que en Morena, donde se registraron casi 3 mil aspirantes, todo el proceso fue gratuito. El partido no cobró cuotas de registro ni por capacitación.
El dirigente de Morena también hizo referencia al audioescándalo en el que se escucha a Paola Angon afirmar que pagó 2.5 millones de pesos por su reelección en San Pedro Cholula. Guerrero Castillo expresó su preocupación ante esta revelación, calificándola de posible delito de extorsión. Exigió una investigación exhaustiva por parte de las autoridades electorales.
Además, Guerrero no escatimó en sus críticas hacia Camarillo, aludiendo a sus presuntas prácticas como similares al “cobro de piso” del crimen organizado. Por ello, insistió en que las autoridades electorales deben tomar medidas enérgicas para evitar que individuos con conductas cuestionables participen en los procesos democráticos.
Finalmente, Guerrero ridiculizó la ambición política de Camarillo, sugiriendo que su aspiración al Senado es poco realista dada la baja representatividad de su partido.
