Tras la entrega de las instalaciones del Instituto Tecnológico de Ajalpan y la conclusión de más de un mes de paro estudiantil, alumnos del plantel acusaron que la directora, Cecilia Valeria Pineda Cruz, presuntamente ha iniciado procedimientos judiciales contra varios maestros que respaldaron el movimiento.
De acuerdo con los estudiantes, estas acciones buscan intimidar y castigar a quienes cuestionaron presuntas irregularidades administrativas y financieras dentro de la institución.
Señalaron que, lejos de retomar el diálogo prometido durante el conflicto, la administración decidió recurrir a denuncias formales contra el personal académico.
Los inconformes afirmaron que esta estrategia intenta “fabricar culpables” y desviar la atención de las anomalías que la comunidad ha señalado desde el inicio de la protesta. Consideraron que, en lugar de atender las demandas planteadas, se ha optado por una ruta de confrontación y presión legal.
Además, señalaron que, desde el regreso a clases, se ha observado de manera constante la presencia de personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) en el campus.
El grupo estudiantil exigió el cese inmediato del presunto hostigamiento judicial contra los profesores, así como una investigación transparente sobre el actuar de abogados y gestores vinculados al Tecnológico.
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