El caso del bebé abandonado en Tultitlán dio un nuevo giro, luego de que las autoridades del Estado de México confirmaran que el menor será entregado en adopción. La decisión se tomó después de que la abuela materna, quien inicialmente se dijo interesada en obtener su custodia, dejó de acudir a los encuentros programados con el niño, lo que la descartó como opción viable.
De acuerdo con la jueza octava de Distrito, Gabriela Villeda, el menor deberá permanecer bajo resguardo de las autoridades mientras se activa el proceso de adopción. La funcionaria subrayó que este procedimiento será riguroso, con el objetivo de encontrar una familia adecuada que garantice el bienestar del niño.
Según muestra el expediente del caso, los padres biológicos del bebé se encuentran en prisión por el delito de homicidio calificado. Además, la carpeta judicial señala que ambos acordaron abandonar al recién nacido envuelto en bolsas de basura en calles de Tultitlán, hecho que generó indignación social y abrió un proceso legal que terminó con la búsqueda de un hogar definitivo para el menor.
Por su parte, la abuela materna, quien en un inicio manifestó su intención de pelear por la custodia, dejó de asistir a las visitas programadas en el DIF, lo que llevó a la autoridad a concluir que no era elegible para asumir el cuidado del niño. Ante esta situación, la jueza determinó que la vía más adecuada es la adopción, descartando cualquier otra alternativa de custodia familiar.
El bebé abandonado en Tultitlán permanecerá bajo protección institucional hasta que se concrete el proceso de adopción. Con ello, se busca garantizar que el menor crezca en un entorno seguro y estable, lejos de las circunstancias que marcaron sus primeros meses de vida.
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