Dios en el poder


Selene Ríos / Edmundo Velázquez


¡Hurra, Blanca, hurra!



¿Lo dijo en serio?


¡No mancheeeeeeeeeeeeees!


¡Sí! Blanca aceptó marchar con la liga LGBTTT el próximo 24 de mayo para defender los derechos humanos de las lesbianas, gays, bisexuales, travestis, transexuales y transgéneros.


Wow.


¿De veras, de veritas? Porque si es en serio, presidenta, nosotros también nos apuntamos y la saludamos.


—¡No Mundo! Marchamos con ella
—Ay, qué pena
—¿Por los gays? No seas homofóbico
—No, por Blanquita, ¿qué tal que lleva su saquito?
—Ya, seriedad Velázquez…Jajaja

 

A ver, estábamos en que la alcaldesa capitalina se comprometió públicamente a asistir a la Séptima Marcha por el orgullo gay el próximo sábado 24 de mayo.


¡Sí!


Blanca Alcalá Ruiz marcará la historia de Puebla y será la primera autoridad que nos acompaña a marchar.

 

En días pasados, Blanca Alcalá, la primera mujer que gobierna Puebla —aunque dicen por ahí que es la primera mujer en ganar la elección por la alcaldía capitalina—, declaró ante las grabadoras de Cambio que estaba dispuesta a salir a las calles a manifestar su repudio contra la homofobia y la discriminación sexual.

 

¡Qué honor, presidenta!

 

Nosotros estamos.

 

Aunque lleve su saquito. Es más, péguele lentejuelas.

 

Salud, pues.

 


De formal a cortés. Desde la semana pasada, Alejandro Fernández Soto, director del Consejo Estatal de Seguridad Pública, se comprometió con el Congreso local a sostener una reunión con los miembros de la Comisión de Seguridad Pública, pero ayer, de última hora, cambió el formato del encuentro.

 

Tras dos cancelaciones, Alejandro Fernández decidió hablar con los diputados de la Comisión mencionada pero no en la sede del Poder Legislativo, sino en un privado del hotel Camino Real.

 

Incluso en la invitación de los diputados se les aclara que el encuentro es de cortesía, no formal y que éste se “traslada” al hotel vecino del Congreso local.

 

¡Qué autoridad muestran, diputados!


Nuestros respetos, caray.

 


Montero y la Carabina de Ambrosio. Teníamos entendido que los secretarios de Gobernación son los hombres mejor informados del estado o del país. Bueno, en Puebla siempre hay excepciones y más en los últimos meses.


Al principio Mario Montero nos daba risita cuando decía que desconocía tal o cual hecho, pero hoy ya comienza a preocuparnos.


Primero, el muy condenadote no tenía ni la menor idea de que un alcalde de su estado y emanado de las filas de su partido —¡que él mismo presidió!— estaba detenido en Estados Unidos por conspiración contra ese país y narcotráfico.


Según Monterito, Rubén Gil estaba enfermito, no detenido en Los Ángeles, California.


Después no tenía ni la menor idea de que la Procuraduría General de la República (PGR) investiga a presuntos integrantes del Cártel de Sinaloa por tráfico de cocaína en el Aeropuerto de Huejotzingo.


Ay, Monterito, hasta López Zavala tenía más idea de lo que hacía.


Y eso, ya es bajo.

 


Aclaración oportuna. Desde hace dos semanas anunciamos que Dios en el Poder estaría dos días a la semana por estos rumbos y así sería, no ha quedado en nosotros, pero el editor Héctor Hugo Cruz no nos ha guardado espacio en las páginas de Cambio y nos hemos quedado como novias de pueblo.

 



 
 

 

 
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