La Manzana


Irma Sánchez


DE MAL EN PEOR


Si bien siempre hemos sabido que la lucha por el poder nunca se ha dado de la mejor manera, que lamentable es que los maestros, los que están para formar a las nuevas generaciones de mexicanos, enseñen a sus alumnos a ganara, a triunfar, a enfrentar la vida para salir adelante a sillazos, por la fuerza.


Así quedó inscrito en la historia de la lucha magisterial cuando el pasado fin de semana los maestros de la Sección 51 sacaron adelante su asamblea y “se sacudieron” la presencia de una mujer, la maestra Dinoarah García Luna, quien originalmente había ganado la elección, que mas tarde fue desconocida para entronizar al maestro Cirilo Salazar.


¡Que pena!


Para esas formas de hacer política, ¿vale la pena todo lo que se inyecta a las nóminas de los mentores?


A lo que concluimos es que el poder es el poder, y por el poder, todo es válido, hasta la ausencia de la educación.


Válido entre y para ellos, mas no para una sociedad que espera sencillamente educación y formación de quienes tienen en sus manos la responsabilidad de formar, instruir y educar a millones de mexicanos.

 

POR NOSOTRAS

Para Blanca Laura Villeda por ser mujer ha tenido que cargar con las culpas de
todos ·Camb io ·Foto / Archivo / Tere Murillo


Por y para nosotras, la OEA declaró la efeméride del 8 de marzo como el día internacional de la mujer.  


Cabe la pregunta ¿y que con esto?


Hay que ser sinceras al hacer un ejercicio, la llegada de cada 8 de marzo sirve al menos para que se acuerden “ellos” que el planeta lo comparten con nosotras, que no están solos.


Esto lo entienden, pero lo omiten por su propia conveniencia desde que son niños y regatean desde los brazos de sus progenitores, hasta el juego correteandose tras de una pelota.


El recordar que el 8 de marzo es el día internacional de la mujer, no representa ningún privilegio para ninguna.


Dependiendo el posicionamiento de cada una en la sociedad, a la mejor el 8 de marzo tiene asegurados buenos arreglos florales, a otro nivel, una fotografía en un diario o en un poster en el que demuestra que ser mujer hoy, representa entrarle parejito a la chamba “de lo que hay” en la albañilería, en la policía, y en estos días hasta en la mecánica.


Para otras, ser mujer y ver que llega el 8 de marzo es “tener” que recordar que incursiona en terrenos que eran exclusividad de los varones, y que gracias a  “la generosidad de ellos” hoy goza de la oportunidad de alternar de tu a tu en el mismo rango.


Ser mujer para Blanca Laura Villeda Martínez, ha representado la estrategia para enfrentar a los más severos jueces dentro y fuera de casa.


Por ser mujer le ha dado brillo a una administración que quiere quedar en la historia como incluyente, plural y abierta además de efectiva.


Pero por ser mujer, ha tenido que cargar con las culpas de todos, para mantener bien lavado el rostro de la justicia que se imparte en Puebla.


A cambio de esto Blanca Laura como homenaje en su día internacional de la mujer se convirtió en la víctima de un rosario de circunstancias que para salvarlas, obligan a “ellos” a que caiga para darle la vuelta a un capítulo histórico de Puebla que solo ella pudo lograr que quedara sin mayor riesgo para la permanencia de una administración.


Y todo a propósito del día internacional de la mujer que se buscó no mancharlo llevándola al cadalso para que rodara su cabeza ante la euforia de unos cuantos a los que ya les lastima su peso.

 



 
 

 

 
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