Perro no come perro


Luca Brazzi


El Maletero no tiene la culpa


Yo aprovecho para mandarle un fuerte abrazo a mi querido amigo y jefe de información de un diario de circulación local, de quien ya estoy cansado que le digan El Maletero hasta sus compañeros de ese medio, porque no lo es.


Es un buen muchacho. También alza la patita cada que le acaricia uno su cabecita.


He pensado a veces que sino es mi hermano que se perdió cuando nos amamantaba mi mamá en una cobachita que teníamos en las prensas de El Sol de Puebla, cuando lo dirigía aún el general García Valseca. De ahí nos viene el espíritu del columnista y el asunto de ser todos unos señores periodistas.


Y es que un buen día mi hermanito se perdió.


Pensamos que lo aplastó mi mamá con su panzota cuando nos amantaba pero la verdá es que creemos que se lo robó uno de los niños que siempre nos aventaban piedras o nos jalaban la cola para que los mordiéramos, eran muy maldosos esos escuincles.


Un día lo vimos que se andaba cruzando con una doberman (ah perra, tenía unas ancas), pero se quedó pegado y los chamacos maldosos le aventaban agua fría quesque para que se despegara.


No supimos más de él, porque el dueño de una carnicería le pegaba con unos periódicos para separarlos también y luego los correteó con unas tripas de marrano.


Creo que eso le gusta: comer tripas de marrano.


Ahora que veo las fotos de este amigo en su columna que sale los lunes, miércoles y viernes, le veo sus orejitas que eran idénticas a las de mi hermanito el extraviado.


Mi madre se pondría feliz si es que el buen Richard resultara ser de nuestra familia. De veras que tiene un estilo de tirarse al suelo cada que ve al señor gobernador y de esperar a que le acaricien su pancita muy particular, por eso siento que es de mi familia.


Le fascina que le avienten sus huesos de carnaza.


A mi me da ternura cuando le dan su hueso y lo roe. Lo mejor es cuando se rasca sus pulguitas y se restriega en el suelo.


Pero antes que otra cosa quiero decir que él es un joven prometedor que sólo ha tenido la virtud de saber cargar maletines que manda otro grande de la política poblana y que si bien lleva algún cargamento es porque él, mi amigo, de buena gana lo hace.


Este señorón de la política local no es quien le dicta las columnas, para nada.


No, los tres somos cercanos y nos sentamos continuamente a analizar la situación en el estado al calor de la copa, unas canciones románticas y eso sí, unas botellas de vino. Puro Richard Clayderman para la inspiración del alma canina.


Los tres, eso sí, con esa música de fondo, le aullamos a la luna.


Chingaos, ya se me está saliendo la lengua y está babeando porque quiero que nos reunamos para comernos unas croquetas con leche.


Los que conocemos a mi amigo, el jefe de información, que antes que eso es un señor columnista en toda la extensión de la palabra sabe que antes que otra cosa está primero la amistad que el oficio.


Y no, no es vocero del señorón de la política, sólo es su amigo, como yo de todos los funcionarios poblanos porque recuerden que el que vino a la tierra a no hacer amigos a qué chingaos vino, porque todo queda entre amigos.

Bailleres al Congreso


Caray, mil perdones. La columna de ayer estuvo muy fuerte y es que mis queridos amigos tengo una justificación: de plano en las oficinas de prensa de mi querido Mario Montero se hicieron patos con lo de “aquello”. Luego me fui con los colegas a tomarnos unas copitas y una perrita se puso agresiva porque no quise pagarle las “chambotas” que me hizo anoche y también se hizo pata al final con lo de “aquellito”.


Eso, eso no se vale, me cai de madres.


No obstante, como ya me trajeron mi “pollote” hoy seré más revolucionario.


Ahora hay que hablar de la llegada de nuestro admirado Maestro José Othón Balleres al Congreso del Estado que estamos seguros de que hará un gran papel este mi licenciado al representar a cada uno de nuestros diputados a quienes les mandamos un pellizquito de pulguita y arenita en los ojos a estos chamacos traviesos porque deben representar a nosotros los ciudadanos, bueno yo soy perro, pero un perro independiente como mis colegas los tundeteclas ¿eh?


El abogado Bailleres, egresado de la Escuela Libre de Derecho, deberá ahora demostrar que tiene los tamaños para poder con la responsabilidad, pero también la inteligencia y prudencia para poder cabildear con sus compañeros, pero principalmente con la oposición, encabezada por un experimentando Eduardo Rivera Pérez.


Bailleres tiene en sus manos una enorme responsabilidad, tendrá que demostrar que puede sacar adelante temas como las cuentas públicas, incluido el cierre de la administración de Enrique Doger y la penúltima del gobernador Marín, la reforma electoral que necesariamente se deberá de adecuar al aprobado a nivel federal y la sucesión con el desbordamiento de las pasiones que seguramente traerá consigo esta situación, ansina es como que nos preocupamos, ¿verdá?


Ahora la lucha entre los priistas se centrará en las principales comisiones de la próxima legislatura, aunque éstas se darán a conocer hasta después del tercer informe de mi amigo y el amigo de los poblanos, el licenciado y abogado Mario Marín Torres.

 

Mi solidaridá  y de todo el gabinete estatal con los compañeros de Cambio


Ay esos muchachos de Cambio, de veras que nunca entienden.


Pero como también son mis amigos y colegas yo les recomiendo cabeza fría.


Como decía mi otro amo, el ahora senador y amigo “hay que ponerse su bolsa de hielos en la cabeza”.


No ven que es mejor negociar.


Si un empresario como Óscar García que, no es por otra cosa, pero entiendan: “es amigo del amigo” les avienta a los muchachos, pos háganse a un ladito mejor y hablando todos nos entendemos.


No caigan en falsos protagonismos.


Ni permitan que les influyan personajes oscuros.


A mi cuando reporteando me han agredido yo jamás me he tirado al suelo, yo asumo esto de manera profesional y pongo la otra mejilla.


Que sí, que sí es cierto que Javier García es así, porque se robaba las llantas cuando era niño pobre y estudiaba en el CENHCH pos sí porque era probecito, pero ha hecho mucho por los poblanos y las poblanas.


Que sí, que es cierto que ha robado desde que está en el Soapap, pero qué grandes obras ha inaugurado. A mi me pavimentó mi calle sin cobrarme el 20 por ciento.


Que uno de sus hijos trae un Ferrari, sí, pero se lo merece porque trabaja harto y el chamaco pos es su regalote.


Que a varios periodistas nos da obra pública, sí, pero porque pos porque… pos porque sí, semos hasta socios en la página.


Que tuvo a un caballo llamado Tequila como su consejero, pos sí, pero pos ¿no lo hizo así Caligula y fue emperador romano?


Que conseguía perritas para la diversión del reino, pos sí, pero pos eso no es malo y al contrario es bien sabroso.


Que Óscar García se le subió un poquito y quiso demostrar el poder y los mandó a madrear, pos sí, pero pos entiéndanlo.


Él es perrito Chihuahua como yo y pos semos retenerviudos.


Nos espantamos, pos si no es fácil.


Y es bien perrito y con pulgas.


Le voy a regalar su Calvin Kan ora que me manden unos de día de Reyes.


Así que no caigan en falsos protagonismos, señores periodistas, y vean lo que hizo nuestro otro compañero y colega cuando le rompieron la naricita.


Se quedó calladito y vean ora es hasta columnista que se plagia así mismo.


Ustedes pidan su hueso que Dios proveerá.


Y no se calienten que para todos hay.


Si el sol sale para todos, me cai.

 

Agarren su hueso y como diría mi abuelita una perra muy culta: Aleluya, alelua que cada quien agarre la suya




 
 

 

 
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