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Pulso Político


Gabriel Sánchez Andraca


El caso de la señora Cacho, arma electoral del PAN: Bátiz


Cada vez se confirma más lo dicho en esta ciudad de Puebla por el ex Procurador de Justicia del Distrito Federal, en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, el maestro Bernardo Bátiz, que antes fue diputado panista y secretario general del comité nacional del PAN: “El asunto de la señora Cacho, es un arma electoral del PAN contra el gobierno del señor Marín. Acuérdense que este es un año electoral para Puebla”, dijo a los reporteros que lo entrevistaron en la Casa de los Muñecos, el pasado mes de marzo.


Las alicaídas campañas panistas, que por más que le hacen, no levantan, orillaron a los estrategas de Acción Nacional, a recurrir nuevamente a la guerra sucia para hacerse notar.


Ayer mismo, hubo una denuncia de candidatos panistas, por una real o supuesta agresión a la esposa del candidato a la presidencia municipal de Puebla.


Se ha visto ya que, en esta etapa del panismo, el escándalo es su arma de campaña preferida.


Don Francisco Fraile, ahora diputado federal, cada vez que convoca a una rueda de prensa, y lo hace muy seguido, es para golpear al gobierno estatal y para exigir un montón de cosas que nunca exigió durante el desgobierno de Luis Paredes Moctezuma.


Coincidentemente aparece destacada en un diario de circulación nacional, una nota en la que se afirma que el Congreso avala el dictamen contra el gobernador Marín y aquí se hace la denuncia de la agresión a la señora Rodríguez de Sánchez Díaz de Rivera.


La ultraderecha es especialista en escándalos periodísticos, en lanzar acusaciones sin pruebas, en crear terror psicológico entre sus adversarios. No es pues raro, que pretendan utilizar nuevamente el asunto Cacho, para golpear al PRI y a sus candidatos.


LA TIBIEZA DE LOS PRIISTAS EN CAMPAÑA
Ayer comentabamos en este espacio, de la tibieza que muestran los priístas en sus campañas políticas por las presidencias municipales y diputaciones.


Parece que creen, que sin señalar los gravísimos errores y fallas de los gobiernos panistas, van a tener la fiesta en paz. Para la derecha cada campaña política es una guerra santa que hay que ganar para mayor gloria de Dios. Y como tienen de aliada a la Divinidad, pues entonces recurrern a lo que sea, con tal de cosechar triunfos que al fin y al cabo, el Señor se los tiene que perdonar, pues la lucha que realizan, es por El.


A lo largo de la historia, la derecha siempre ha actuado en la misma forma. Es la misma que emplea la izquierda y todo grupo extremista. En la Universidad Autónoma de Puebla, cuando el movimiento de los sesenta y setenta, hubo un momento en que los liberales tuvieron el gobierno de la institución en sus manos, con Martín Carbajal como rector, pero lo perdieron en con una izquierda acelerada, que no permitía tibiezas. O estás conmigo o estás contra mí.


Los priístas, nosotros lo entendemos, no se van a poner al tú por tú con los acelerados derechistas del PAN, pero sí pueden luchar con dignidad, solo basta con que hagan análisis de los gobiernos federales del PAN, de los últimos gravísimos problemas que han surgido en el país y de lo pésimo que han actuado ayuntamientos municipales ganados por el partido azúl. También pueden aprovechar no solo el enriquecimiento desmesurado de Vicente Fox y Marta Sahagún, sino, la exhibición que hacen de su riqueza ante un pueblo de millones de miserables, pues el sistema económico prevaleciente, no les permite mejorar su sistema de vida, por mucha lucha que le hacen.


LO QUE DICEN LOS ABOGADOS DEL ASUNTO CACHO
Para reconocidos jurisconsultos poblanos, el Congreso no ha avalado el dictamen del magistrado Juan N. Silva Meza, porque no ha sido tratado en el pleno del Poder Legislativo.


El asunto está en manos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que emitirá su dictamen en la primera quincena de octubre. No es costumbre de los organos judiciales y menos de la Suprema Corte, andar informando sobre sus resoluciones antes de tiempo, pero además jurídicamente no ven ningún problema.


La señora Cacho fue denunciada por un ciudadano poblano, Kamel Nacif, por difamación, ya que en el libro “Los demonios del edén”, se le señala como pederasta o cómplice de un pederasta. Este asunto ha sido resuelto ya, cuando los abogados de la señora Lydia Cacho, pidieron una disculpa al señor Nacif, afirmando que no estaba comprobado que tuviera algo que ver en el asunto. Esto fue publicado en los diarios nacionales, La Jornada, entre ellos.


Las autoridades judiciales poblanas procedieron de conformidad con la ley. La señora Cacho fue aprehendida en Quintana Roo, traída a Puebla. A su llegada la esperaban en el penal de San Miguel, una senadora de la república, Lucero Saldaña, abogados, familiares, periodistas y representantes de organizaciones de Derechos Humanos.


No permaneció detenida ni 24 horas, pues pagó la fianza y se le puso en libertad. No hay pruebas de maltrato o de violación a sus derechos constitucionales.


Lo único que hay es la grabación de una conversación telefónica entre Kamel Nacif y el gobernador Marín Torres, que según peritos, fue alterada. Pero aunque no lo hubiera sido, la prueba no tiene validez, puesto que constitucionalmente está prohibida la intervención de teléfonos, a menos que haya una orden judicial y para un caso específico. Quien debería estar en problemas sería el que hizo la grabación, pues cometió un delito federal.


Así las cosas, este asunto viene siendo como el del español que pedía que si se moría en México, quería que lo enterraran en España y si se moría en España, quería que lo enterraran en México. Cuando uno de sus parientes cercanos le preguntó el porqué de esa decisión, el gachupín respondió: “Nada hombre, por fregar”. Hay que tener presentes las palabras de don Bernardo Bátiz: “El asunto de la señora Cacho, es un arma electoral del PAN”.


 

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