Mundo Rural


Hipólito Contreras

07/05/2009

Candidatos en campaña

Por la contingencia sanitaria, las campañas políticas que se iniciaron el pasado domingo 3 de mayo, no serán de actos masivos para evitar posibles problemas de contagios, serán actos ante grupos reducidos. Los candidatos utilizarán otras estrategias como los trípticos, volantes, el uso de la radio y televisión y hasta el internet.


Lo importante será que los candidatos hagan llegar el mensaje a los ciudadanos de todos los sectores sociales.


Ubicándonos concretamente en el medio rural, que es el que interesa a este espacio, ¿ qué mensajes se esperan? Se supone que los mensajes, la oferta política, tiene como fin convencer a los ciudadanos de que determinado candidato o partido político es la mejor opción, los candidatos a diputados federales buscan votos y para ganarlos tienen que convencer de que vale la pena votar por ellos.


¿Qué cosas nuevas le dirán a los ciudadanos de las comunidades que integran los dieciséis distritos electorales? ( en Puebla capital también existen comunidades en algunas de sus juntas auxiliares) ¿ que mensajes nuevos les darán los candidatos y que los ciudadanos no conozcan? ¿ cómo los ciudadanos de los pueblos se sentirán atraídos por esas propuestas al grado de que votarán por ellas?


Si los ciudadanos rurales enfrentan una realidad de desempleo, altos costos de productos y servicios, migración, inseguridad, bajos niveles de producción por los altos costos de los insumos, bajos precios de sus productos en el mercado por la cadena de intermediarios, bajos niveles educativos y conflictos magisteriales, altos niveles de desnutrición, etc., ¿ quién les va a ofrecer mejores perspectivas para lograr mayores niveles de vida?


Los ciudadanos de la comunidades saben muy bien que las campañas políticas son una cascada de promesas y compromisos, de discursos y buenas intenciones, saben muy bien que muy poco de eso se va a cumplir, ellos saben que en los próximos tres años las cosas no van a cambiar positivamente y que sus condiciones actuales serán la mismas, ellos saben por experiencia que quienes sean electos candidatos difícilmente van a regresar a sus distritos, y que sólo algunos lo harán, los demás se harán como que no oyen ni ven, sólo estarán pendientes de sus jugosos salarios.


Así las cosas, los ciudadanos de las zonas rurales, urbanas y semi urbanas, no tienen mayores perspectivas con los candidatos, saben ya lo que les dirán, saben ya de sus promesas y compromisos y que no van a cumplir, saben muy bien que cada tres años se repiten las mismas escenas, los candidatos llegarán con gorras, playeras, llaveros, despensas, etc., comprarán mucho tiempo en radio y televisión, y que por supuesto será pagado con recursos públicos.


Los candidatos de la llamada izquierda prometerán cambiar a este país, propondrán un nuevo país, un nuevo modelo económico, en donde haya equidad y justicia para todos, salud para todos, educación para todos, tranquilidad para todos, empleos bien pagados para todos, deporte para todos, cultura y esparcimiento para todos, atención a los problemas ambientales y ecológicos, criticarán con dureza a los partidos de derecha y condenarán al modelo económico neoliberal.


Es cierto, en la llamada izquierda hay gente de avanzada, luchadores, líderes e intelectuales que buscan cambios de fondo para este país. Los ciudadanos los escuchan, reconocen que son buenas propuestas, pero éstas no caminan, su situación es la misma, el campo n o cambia, la gente sigue emigrando, las ciudades siguen creciendo por las oleadas campesinas, los grupos emigran por falta de oportunidades y apoyos.


Los ciudadanos necesitan en quien creer, sin embargo, no sienten que la llamada izquierda los cobije, los organice y los lleve a estrategias de lucha, aún cuando otra izquierda más liberal, unida y organizada avanza en otros países de América.


Los agudos problemas económicos llevarán nuevamente a que nuestra gente, sobre todos de las zonas rurales, acepten los pequeños presentes que les llevan los candidatos, una caja con despensa, por ejemplo, ya será buena para muchas familias, algunos materiales para construcción aliviarán un poco a miles de familias sin vivienda, con estos regalos los ciudadanos votarán por quien se los dé sin considerar nada más, lo que importará será cubrir una necesidad.


Para los hombres y mujeres del campo el recibir nuevamente a candidatos a cualquier cargo de elección será una rutina más que se repite cada tres años y a la que ya están acostumbrados ¿cambios, apoyos, tecnología, recursos al campo? Preguntarán, no señor, contestarán, aquí no hay nada, aquí la gente se tiene que ir porque la actividad ya no es redituable, todo está caro y nuestros productos no valen en el mercado.


Candidatos en campaña, ¿ para qué? ¿ para qué tanto dinero tirado si sigue una lucha de clases, si un puñado de políticos y empresarios siguen acumulando riqueza?.


Los mensajes de la derecha llegarán a todos los rincones del país, los ricos le dirán al pueblo de México: “nosotros sí trabajamos para ti, nosotros hacemos obra para ti, nosotros hacemos y reformamos leyes para que vivas mejor, nosotros estamos metiendo a la cárcel a los que amenazan tu seguridad, nosotros sí pensamos en ti, nosotros sí sabemos gobernar”.
Lo que no dicen es que ellos, los dueños del poder político y económico, se proponen seguir ahí por tiempo indefinido, no dicen que son ellos los que deciden, como iluminados y escogidos por Dios, lo que le conviene a este país, y que a todos los demás sólo les corresponde obedecer. Esos son los candidatos en campaña, por supuesto, con sus honrosas excepciones.

 



 
 

 

 
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