Mundo Rural


Hipólito Contreras

26/10/2009

Rellenos Sanitarios


¿Qué hacer con tantos miles de tantos miles de toneladas diarias de basura que se generan en el estado, en la capital y los otros 216 municipios? Esa es la preocupación que tienen los gobiernos.


A medida que la población crece también los desechos de todo tipo, sobre todo lo peligrosos y muy peligrosos como son los desechos industriales y hospitalarios.


Sólo la capital del estado genera en promedio mil 300 toneladas diarias de basura, su destino el relleno sanitario Chiltepeque ubicado en la junta auxiliar de Santo Tomás Chiautla, mismo que ha llegado a su capacidad máxima, pero tratan de prolongarla por lo menos cinco años más ¿ y después?


Después no se sabe cómo las autoridades municipales resolverán el problema, el municipio de Puebla ya no tiene lugares adecuados para depositar la gran cantidad de desechos, tendría que buscar otro municipio cercano, lo que incrementará los costos.


Ahí en Chiltepeque la empresa que los maneja asegura tener lista la tecnología para generar electricidad a partir del aprovechamiento del gas metano, el proyecto existe, la ejecución del mismo no se sabe cuándo.


El problema real es que ese relleno sanitario está a un ochenta y cinco por ciento de su capacidad y pronto estará al cien por ciento, la siguiente administración municipal tendrá que buscar dónde.


Respecto a la basura y desechos de los otros 216 municipios el problema también es preocupante, el gobierno del estado a través de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales en coordinación con empresas privadas ha creado por los menos diez rellenos sanitarios intermunicipales, la idea es que cada uno atienda a varios municipios.


No todos los rellenos sanitarios funcionan como lo establece la norma, se supone que se aplican tecnologías para que la basura depositada no dañe los mantos freáticos. Uno de los rellenos sanitarios que ha tenido serios problemas es el de Huejotzingo, organizaciones sociales han denunciado la grave contaminación porque el lugar se ha convertido en un tiradero al aire libre.


Las organizaciones que han denunciado lo que sucede ahí, preguntan cómo es que las autoridades aprobaron la construcción de un relleno sanitario en una región que almacena grandes cantidades de agua, es la zona de los deshielos del Popo y Izta, es el Valle de San Martín-Puebla de tierras fértiles y muy productivas.


La Secretaría del Medio Ambiente deberá pensar en reubicar el relleno sanitario para evitar mayores problemas de contaminación en el agua, suelo y daños graves en la salud de la población.


Si a los rellenos sanitarios ( y tiraderos al aire libre que aún los hay en el estado) se depositan residuos peligrosos como los que vienen de los hospitales, la industrias, talleres, etc., la situación es aún más peligrosa por el alto nivel de contaminación de esos desechos y que dañan de manera peligrosa los mantos freáticos.


Si la basura es un gran negocio como lo muestran ya las empresas dedicadas al reciclaje de desechos y los cientos de personas que se dedican a la recolección de vidrio, latas, metales, cartón, plásticos, etc., debería de trabajarse para que desde los hogares se haga esta separación y posterior venta en los centros de acopio, esto generaría algunos ingresos para las familias.


Se podría trabajar también con los desechos orgánicos para la producción de composta o abono orgánico, sin duda esto necesita capacitación, pero sería una buena opción para productores que necesitan cada vez más pensar en los productos orgánicos libres de químicos.


Una pregunta que le hago a la Semarnat federal y estatal es ¿ que se hace con los miles y millones de llantas cada año? ¿ se reciclan o qué se hace con ellas? Quemarlas representa un grave problema de contaminación al medio ambiente.


Estas opciones del reciclaje ( que ya se hace en buena parte) y en la producción de abonos orgánicos, reduciría los grandes volúmenes de desechos en los rellenos sanitarios, los que con las modernas tecnologías pueden generar energía eléctrica.


Los desechos producidos en grandes cantidades por el crecimiento poblacional e industrial, bien manejados, con tecnología, pueden controlarse y hasta dejar beneficios económicos, se trata que el gobierno federal, los gobiernos estatales y municipales, les den la atención necesaria y que a las acciones se sume la población con las medidas que puede aplicar como es la separación o clasificación de los desechos.


Por supuesto, en este sector como en otros se requiere la participación de las universidades con sus propuestas, sus innovaciones tecnológicas.

 



 
 

 

 
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